El gobierno cubano dio la noticia que se está realizando un Certificado Digital de vacunación contra la COVID-19, llamándole «carnet digital de la COVID» y se estará estrenando este 14 de febrero.
José Ángel Portal Miranda, ministro de salud pública, señaló el pasado jueves explicó en la reunión del Grupo Temporal de trabajo para la prevención y control de la pandemia, que el carnet se estará presentando el lunes 14 de febrero, pero esto es a modo de prueba.
Además, hay atrasos en el flujo de datos en varios territorios, así que algunas personas no han podido acceder a sus certificados de vacunación, a partir de ahora esas personas se podrán dirigir a su área de salud para solicitar la digitalización de sus informes.
Es cuestionable la cantidad de áreas de salud en el país donde no aparece ni hilo para suturar las heridas, aún así el gobierno asegura que existirán las condiciones creadas para que las personas tengan su carné digital con la información sobre las vacunas que se han aplicado.
El documento se puede descargar desde sus teléfonos celulares y también pueden imprimir sus certificados de vacunación.
Según la prensa oficialista más del 88 por ciento de la población en Cuba completó el esquema de vacunación contra el coronavirus con las vacunas de producidas en el país. Así que la digitalización del proceso de inmunización incluye más del 80 por ciento de la población vacunada con el esquema completo.
Desde mayo del 2021 se anunció que el Estado estaba trabajando en un pasaporte digital COVID-19, con el objetivo de registrar los datos de personas vacunadas. En ese momento estaba en fase de prueba, siendo diseñado por el equipo Z-17 de la Universidad de Ciencias Informáticas (UCI). Explicaron que los datos que ofrecía el pasaporte eran totalmente confidenciales.
Con el objetivo de lograr los avales de uso de emergencia de la Organización Mundial de Salud, el Gobierno cubano confirmó, a finales de enero del 2022, presentará las vacunas producidas en este país frente a este organismo.
Este proceso puede demorar meses y es costoso, señalan científicos cubanos del Instituto Finlay, asegurando tener “datos clínicos muy valiosos, de un primer nivel” de ambas vacunas.


