Un ciudadano iraní que vive en La Habana en calidad de refugiado junto a su esposa desde hace casi 3 años, denunció el hecho de que las autoridades cubanas no permiten que las personas en su condición abran cuentas bancarias en el país, las que son estrictamente necesarias en el caso de querer comprar artículos de primera necesidad en tiendas en Moneda Libremente Convertible (MLC). En la actualidad, estos establecimientos comerciales son los únicos mínimamente abastecidos en todo el país.
El medio independiente Havana Times publicó la misiva redactada por Keivan Esfandiyar para explicar su situación de limbo legal en cuanto a las transacciones comerciales en Cuba, pues no tiene permiso de trabajo y depende solamente de los fondos que le otorga la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR).
Las ambiciosas reformas económicas puestas en práctica en Cuba en estos últimos años agravaron significativamente su estado, porque a la vez que no contaba con el derecho de crear una tarjeta y cuenta bancarias para acceder a las tiendas habilitadas para operaciones en MLC, la ayuda de supervivencia que le era cedida se redujo a un tercio de su volumen cuando llegó la pandemia del coronavirus.
Esfandiyar refirió en la carta que a la pareja le era entregado un estipendio en efectivo en los extintos Pesos Convertibles (CUC) hasta enero de 2021, y cuando esta moneda pereció, «fue reemplazada con lo que ellos llaman MLC (monedas extranjeras) que no existen en efectivo, sino únicamente en las tarjetas bancarias. Estas solo sirven para comprar en las tiendas del Gobierno que venden a precios en dólares estadounidenses».
Comentó que la ACNUR ha entregado los estipendios en Pesos Cubanos (CUP) desde principios de este año, a la tasa oficial fijada por las autoridades de la isla con anterioridad (de 24 CUP por 1 CUC), lo que señaló que era una «tasa irreal de moneda extranjera que anunció el Gobierno cubano y que la ACNUR tuvo que respetar».
Explicó entonces que el MLC se cotiza ahora a más de 70 CUP en el mercado negro porque la tasa cambiaria oficial no se utiliza (pues el Estado no vende divisas extranjeras a la población).
Comentó que él ha enviado numerosos correos electrónicos a la oficina central de la ACNUR para señalar el problema y proponer alternativas que sirvan como soluciones a su situación, como tarjetas temporales para comprar en esas tiendas hasta que se encuentra otra vía. Aseguró entonces que «nos ignoran o dicen que no es posible».
Contó además que su caso es especialmente complejo, pues ambos miembros de la pareja sufren de trastorno obsesivo compulsivo (TOC) y deben tomar pastillas de 200 mg de sertralina a diario, las que están en falta en el país desde hace meses.
Citó, por último, un comentario que escuchó mientras conversaba con un refugiado afgano, quien dijo que en su país y con la crisis social provocada por la influencia de los talibanes, «hay más alimentos y medicamentos en comparación con Cuba».
. En la actualidad, estos establecimientos comerciales son los únicos mínimamente abastecidos en todo el país.){kind=link}