La Empresa Pesquera Industrial de Cienfuegos (Epicien) comenzó a ofertar a través de Internet todo tipo de pescado, colas de langosta y demás productos del mar, con precio en Moneda Libremente Convertible (MLC).
La empresa estatal cienfueguera se sumó así al avanzado proceso de dolarización de la economía cubana que se está llevando a cabo desde hace poco más de 2 años, fenómeno que se está desplegando a raíz del desesperado interés del Gobierno cubano por acaparar divisas extranjeras de cualquier forma, en medio de la gravísima crisis económica agravada por la llegada de la pandemia del coronavirus y demás factores.
A la vez que esta entidad cubana vende chernas, filetes y ruedas de clarias, hamburguesas de pescado y langosta, la población cubana se ve cada vez más limitada para la adquisición de alimentos del mar, pues las pescaderías en CUP están totalmente desabastecidas y ya no se encuentra oferta ni en el mercado negro.
Yansyslay Hernández Valdés, director adjunto de Epicien, declaró que la institución que dirige ha experimentado un crecimiento en el número de clientes por mes desde enero, y que esto ha incidido positivamente en las entradas de MLC.
El funcionario señaló que, hasta el momento, las entregas se realizan en la pescadería de la calle 35 (Gazel) y avenida 56 (San Carlos) de la ciudad de Cienfuegos, pero que se prevé poder ofrecer el servicio a domicilio muy pronto, a la par que se incorporen nuevas y atractivas propuestas.
La prensa local indicó este martes que la Empresa Pesquera Industrial de Cienfuegos se dedica a la «captura, cultivo, industrialización y comercialización de especies de plataforma y acuícola, así como las producciones adquiridas de la pesca comercial privada»; y esta también exporta camarón, pescados varios, vejiga natatoria y aleta de tiburón, todos en cualquier tipo de pre-elaboración.
El sitio web oficial de la empresa muestra que la cherna entera cuesta casi 40 USD, un kilogramo de filete de claria vale 5,63, la bolsa de 10 hamburguesas es a 3,13, la bolsa de un kilogramo de claria sin piel vale lo mismo, y la langosta es a 32,50.
Ahora que la mayoría de los establecimientos comerciales del país están casi completamente desabastecidos, las autoridades cubanas están tratando de estimular la comercialización vía internet. La única opción que le queda a la población cubana en la actualidad para satisfacer sus necesidades más básicas es acceder a las ofertas de venta en monedas extranjeras.
Por supuesto, el cubano no cobra ninguna divisa foránea por concepto de salario, por lo que la brecha que se ha formado entre los que cuentan con dólares y los que no, ha sido inimaginable. Pese al enorme rechazo popular que ha generado este tipo de comercios en el país, el Gobierno no pretende deshacerse de ellos todavía, al menos hasta que la isla se recupere de la severa crisis general que está viviendo.
Pese a que Cuba es una isla, el pescado de mar y el marisco son productos raros y costosos. Los cubanos apenas tienen posibilidad de consumirlos, pues el Estado solo los comercializa en variedades elaboradas, sobre todo croquetas y picadillo, y no autoriza la pesca excepto en contados casos.
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