El periódico estatal Granma, órgano oficial del Partido Comunista de Cuba, expresó que los cubanos encarcelados tras las protestas antigubernamentales del 11 de julio son «ladrones y agresores» en un texto donde se negó la existencia de presos políticos en la Isla.
El artículo, que está firmado por Michel E. Torres Corona, expresa que las personas que se manifestaron pidiendo libertad el 11J en decenas de ciudades y pueblos del país lo hicieron a causa de una campaña «político-comunicacional proyectada desde el exterior», aunque se reconoció que el país pasa por una crisis de escasez y desabastecimiento.
En el artículo se expresa que muchos de los manifestantes fueron puestos en libertad algunos días después de las protestas, a la vez que acusa a los manifestantes que quedan en prisión o en espera de juicio, de violentar, destruir, robar e incluso atacar hospitales, de lo que no existe ninguna prueba.
Según la publicación de la prensa oficial, los «enemigos de la Revolución» pretenden mostrar a «ladrones y agresores como tristes víctimas del régimen cubano», calificándolo como «una guerra semántica que trata de vaciar conceptos para tratar de dignificar lo incorregiblemente indigno».
Organizaciones no gubernamentales como Prisoners Defenders declararon que al terminar el 2021 el régimen de la Isla mantenía encarcelados a 842 personas por razones políticas, de los 955 que fueron privados de libertad por esa razón todo el año.
La cifra «no es más que una fracción» del total, el reporte aseguró que si bien en enero de 2021 la organización tenía registrados 138 presos políticos, al culminar el año se sumaron unos 817.
De estos casos, 700 se corresponden a la represión del 11J y el 15N en Cuba, «cifra aún inferior al 40% respecto al total generado por la ola represiva, pues resulta del todo imposible conocer los casos entre la población», señaló el CPD.
El texto publicado en el Granma es parte de una campaña comunicativa encaminada a blanquear los sucesos del 11J tras el aumento de las denuncias realizadas por organizaciones internacionales, así como de artistas y demás figuras de relevancia pública.
Un ejemplo de rechazo al régimen por el encarcelamiento de aproximadamente un millar de manifestantes fue la cancelación de presentarse en el San Remo Music Awards Cuba un grupo de artistas internacionales y cubanos.
