El miércoles, ciudadanos haitianos salieron a las calles para exigir la liberación de la doctora cubana Daymara Pérez, quien fue secuestrada por bandas en la provincia de Petit Goave el 13 de enero.
La manifestación provocó una interrupción del transporte en la Ruta Nacional 2 y el cierre de negocios. «La delincuencia no puede reinar en nuestro país. Si Pérez no es liberado, intensificaremos nuestra manifestación», advirtieron los manifestantes.
Residente en Haití desde 2020, Pérez se dirigía al trabajo en un autobús público cuando pandilleros la agarraron en el barrio de Martissant. “Ella fue la única pasajera que fue secuestrada”, lamentó su jefe, el director del Hospital de Notre Dame, Fred Jasmin, quien también confirmó que los secuestradores exigieron un rescate de US$100.000.
Aunque la doctora no es enviada especial del gobierno cubano, su Embajada aseguró que apoyará a sus familiares y coordinará esfuerzos con la Policía haitiana para acelerar su liberación.
Daymara Helen Pérez Alabedra fue secuestrada hace ocho días cuando se dirigía a Puerto Príncipe, confirmó al Miami Herald un colega médico que no quiso ser identificado. Pérez viajaba en un autobús público junto con otros pasajeros cuando los pandilleros la detuvieron en Martissant. La comunidad plagada de pandillas en la entrada sur de la capital ha sido escenario de enfrentamientos mortales que han obligado al desplazamiento de más de 19,000 haitianos de sus hogares desde junio.
“Ella fue la única que fue secuestrada”, dijo el médico.
El médico dijo que la pandilla inicialmente pidió un rescate de $1 millón y luego un rescate de $100,000 que negociaron aún más. Finalmente, se pagó un rescate de $10,000 dólares, pero Pérez no fue liberada.
Esto no es inusual en Haití, donde las pandillas a menudo retienen a las víctimas incluso después de que se realiza el pago.
Un portavoz de la policía nacional de Haití no pudo confirmar de inmediato el secuestro de Pérez, que ha sido noticia en la prensa local.
Según su página de Facebook, Pérez es originaria de Las Tunas, provincia del oriente cubano, y vivía en Grand Goâve, una comunidad rural al sur de la capital en la comuna de Léogâne. Pérez vivió los últimos tres años en Haití y trabajaba como especialista en medicina general en el Hospital Notre Dame en la vecina Petit-Goâve.
