El joven camionero cubano que mató a cuatro personas cuando estrelló su camión de 18 ruedas contra decenas de vehículos en una carretera de Colorado fue sentenciado a 110 años consecutivos de prisión, aunque entre lágrimas insistió en su juicio en que «no es un asesino».
Rogel Aguilera-Mederos, de 26 años, se había precipitado por la I-70 en Lakewood el 29 de abril del 2019, virando tan bruscamente que sacó a otros autos de la carretera, según contaron los testigos a los miembros del jurado en su juicio.
Luego estrelló su camioneta contra más de dos docenas de autos y otros cuatro semirremolques que ya estaban detenidos en la carretera tras de un accidente anterior, según un informe de Fox 31.
El accidente produjo una enorme bola de fuego que incineró algunos de los vehículos, matando a cuatro personas y hospitalizando a otras seis, señaló el Denver Channel.
Aguilera-Mederos, quien afirmó que sus frenos habían fallado antes del accidente, fue condenado en octubre por 42 cargos, incluido homicidio vehicular y asalto en primer grado, señaló el medio local. También fue declarado culpable de varios cargos de conducción imprudente, conducción imprudente y asalto vehicular.
Antes de ser sentenciado el lunes, Aguilera-Mederos se quebró cuando se dirigió al juez Bruce Jones y a los familiares de las victimas.
«Estoy pidiendo perdón a todos», dijo en la corte del condado de Jefferson, según imágenes de KDVR.
«Es difícil vivir con esto… Una parte de mí también desaparecerá para siempre», continuó.
“Este fue un terrible accidente, lo sé. Asumo la responsabilidad, pero no fue intencional. No soy un criminal. No soy un asesino… no soy yo. Nunca pensé en lastimar a nadie en toda mi vida, y mi Jesucristo, él lo sabe», dijo a la corte.
«El accidente, no fue intencional», insistió.
Aguilera-Mederos le dijo a la corte que era un inmigrante de Cuba que había estado «trabajando por el sueño americano».
“No estaba robando un banco o una tienda. No estaba disparando a las multitudes ni a la escuela. No estaba bajo la influencia de drogas o alcohol… estaba trabajando por un futuro mejor para mi familia», dijo
El juez reconoció que Aguilera-Mederos no tenía la intención de dañar a nadie, y culpó a las pautas de sentencia por la fuerte condena de 110 años de prisión, que se cumplirá consecutivamente.
«Si tuviera la discreción, no sería mi sentencia», dijo el juez, según CBS 4.
Aún así, dijo que Aguilera-Mederos «tomó una serie de decisiones terribles, decisiones imprudentes».
Las cuatro personas que murieron eran todos de Colorado. Eran Doyle Harrison, de 61 años; William Bailey, 67; Miguel Angel Lamas Arrellano, 24; y Staney Politano, 69.


