El Gobierno Provincial de La Habana penalizó este lunes al proyecto Sarao y a los responsables del concierto del popular cantante Diván este 6 de noviembre en los Jardines de La Tropical, por incurrir en severas violaciones de las medidas sanitarias establecidas para la prevención del contagio con el coronavirus.
El periódico estatal Tribuna de La Habana informó que las autoridades capitalinas habían impuesto estrictas sanciones porque en dicho evento «participaron miles de personas», hacinadas por la falta de espacio, infringiendo totalmente los protocolos establecidos tras la reciente apertura de la vida cultural de la ciudad.
El Grupo Temporal de Trabajo de La Habana (GTT) designó una comisión tras lo sucedido para investigar sobre las condiciones bajo las que se desenvolvió el concierto. La indagación resultó en el conocimiento de que el evento se llevó a cabo sin la autorización requerida por parte del Gobierno local, y el espacio no solo sobrepasó el 50% de capacidad que se ha permitido para este tipo de actividades, sino que se superó el 200% de la capacidad.
Debido a las irregularidades evidenciadas, el director, el subdirector y el jefe de Recreación de la instalación fueron definitivamente separados de sus obligaciones laborales.
La Inspección Sanitaria Estatal (ISE) los penalizó también con una multa por persona de 3.000 Pesos Cubanos (CUP), por contravenir las disposiciones vigentes en el Decreto Ley 31 sobre la prevención y control de la pandemia de COVID-19.
Tribuna aseguró que actualmente «se valoran otras medidas que se pudieran aplicar a los responsables por haber incurrido en la propagación de epidemia».
Asimismo, el especialista de Recreación y el subdirector de la empresa Recreatur fueron cesados en su vínculo laboral, debido a que el centro, ubicado en Calle Tropical y Avenida Rizo, Puentes Grandes, en el municipio de Marianao, pertenece a dicha entidad.
A causa de no cumplir con las condiciones higiénicas para brindar sus servicios al público en estos momentos, los Jardines de la Tropical también fueron designados para cerrar, de acuerdo a lo que dispuso el ente sanitario estatal.
Mientras, Reinaldo García Zapata, Gobernador de La Habana, demandó un control rígido de los centros recreativos en La Habana y de sus respectivas actividades, las cuales deberán tener la autorización de las autoridades territoriales.
El GTT analizará, todos los lunes, las incidencias correspondientes al fin de semana, tras lo que aplicará medidas severas a quienes transgredan las regulaciones vigentes.
