Armando Sardiñas Figueredo, un joven cubano de solo 20 años de edad, acaba de ser sancionado a cumplir condena de 10 meses de trabajo en la agricultura tras participar en las protestas populares masivas del pasado 11 de julio en la isla.
El Tribunal Supremo le informó que permanecerá durante ese tiempo en un centro correccional ubicado en un campamento, el que no puede garantizar las condiciones de comodidad que los internos deberían recibir, por lo que Armando deberá asistir al alojamiento con «toalla, sábana, un cubo, ropa apropiada para la que se desempeñará, utensilios y productos de aseo personal, etc».
En esto se resume todo,trabajo forzado y cumpliendo una sanción injusta por tan solo pensar diferente y no quedarme callado delante de lo que está mal??♂️ pic.twitter.com/v30C6LAbor
— #freearmandito (@soy_armanditoo) September 20, 2021
El muchacho, al recibir la orden judicial, comentó sobre el documento desde su cuenta personal de Twitter, mostrando gran indignación por ser condenado injustamente a trabajo forzado «por tan solo pensar diferente y no quedarme callado delante de lo que está mal».
El cubano se sumó a las manifestaciones cuando iba camino a su trabajo, y fue entonces cuando las fuerzas del orden del régimen lo arrestaron.
La organización independiente Cubalex, la que se ha dedicado a contabilizar y dar seguimiento a las detenciones, desapariciones y actos de violencia desatados aquel domingo, precisó que Sardiñas Figueredo fue interceptado por la Policía frente al Capitolio de La Habana, y fue trasladado al centro de detención 100 y Aldabó, para ser víctima de uno de los tantísimos juicios sumarios que se produjeron para condenar a los más de 1.000 detenidos.
Fue sentenciado a cumplir 10 meses de cárcel en aquella ocasión. Su abogado presentó una apelación el pasado 28 de julio para solicitar un cambio de medida a prisión domiciliaria, pero fue denegada. El joven no fue liberado hasta el pasado 6 de agosto.
No obstante, sí se le aplicó un cambio de medida y ahora cumplirá «10 meses en una granja con trabajo correccional y posibilidad de salir de pase», casi como si estuviera pasando por el Servicio Militar Activo.
Yo me voy a cumplir el día 7 una sanción injusta pero este no es el fin sólo es una muestra de que tienen que quitarse la venda de los ojos y ser realista.
— #freearmandito (@soy_armanditoo) September 20, 2021
La activista Diasniurka Salcedo Verdecia explicó que Armando es huérfano desde los 18 años y ha sufrido de depresión desde entonces, cuando su madre falleció. Es natural de La Habana y se desempeña como cocinero.
Vive solo y tiene una hermana que reside en el exterior, su única familia. El joven solo se apoya por las madres de sus amigos, quienes le han brindado mucha consideración y lo califican como un muchacho muy noble y trabajador.
Armando no es el único joven cubano que fue detenido y procesado penalmente por unirse a las manifestaciones del 11J a exigir cambios para el país, pues Cubalex estima que han sido 1.079 los apresados, incluidos 30 menores de edad (algunos de los cuales han podido ser condenados a prisión gracias a ser mayores de la edad penal en la isla: 16 años).
Estos muchachos están siendo sancionados bajo los cargos de desacato y desorden público, y han sido víctimas de torturas y otras técnicas represivas e intimidatorias durante su detención.


