Un nuevo ejemplo del protagonismo del sector privado en la Isla ha estado circulando en las últimas horas en redes sociales.
Se trata de cuatro campesinos tabacaleros de la provincia Pinar del Río, que se unieron para pagar de su bolsillo los cinco aires acondicionados que se requerían para habilitar otra sala de terapia intensiva en el Hospital Abel Santaria de Pinar del Río.
Según la información proporcionada por la periodista Belkys Pérez Cruz, el hospital necesitaba de los aires acondicionadas para poder ampliar la capacidad de atención a convalecientes de la COVID-19. Afortunadamente, los equipos llegaron en menos de 24 horas.
Gracias al noble gesto de Elpidio Aguiar Porras, Juan Ramón Vega Pacheco, Leoncio Torres Cabrera y Servilio Jesús Rodríguez Córdova. En minutos la nueva sala comenzará a funcionar.
El agradecimiento extensivo a Orta, el artesano, que con el fin de agilizar el trámite compró y trasladó los equipos en su propio vehículo hasta el hospital.
La reportera mencionó además que en tan solo unas pocas horas se lograron montar los equipos y quedaron listos 3 cubículos, con lo que se suman 10 nuevas camas a la sala de 18 capacidades.
Lo sucedido ha desatado la polémica en redes sociales, ya que mientras algunos felicitaron a los campesinos por su noble gesto, otros criticaron que la dirección del país no haya destinado los recursos para tal fin. Especialmente señalando que son las propias tiendas del Estado las que venden estos equipos.
Qué opinión les merece ésta noticia? No tiene el gobierno de #PinarDelRio dinero para comprarlos? ??♂️ Hay cosas que no entiendo.#SOSCuba #CubaMuere pic.twitter.com/vjbju3PWTv
— Sandy Dueñas ??? (@san235err) September 8, 2021
«No se preguntan cómo supieron los tabacaleros que el hospital necesitaba eso. Una vez vi un reportaje en el NTV donde un TCP que hacía caretas (acrílico covid) dijo que se le hacercaron y le dijeron que donara al sistema de salud. El dio el paso al frente»; «Los tabaqueros de Vinales pueden arreglar a Cuba si los dejan …en serio ahora: Cuba puede arreglarse en menos de un año», comentaron algunos.


