Tras el estallido de las históricas protestas populares masivas del pasado 11 de julio, el Gobierno cubano ha mostrado especial interés en «resolver» problemas que han venido aporreando a la población cubana por décadas, hasta el punto de iniciar labores constructivas en barrios pobres del municipio habanero de Diez de Octubre con materiales que ‘milagrosamente’ aparecieron.
La prensa oficialista cubana informó que se identificaron «604 acciones a desarrollar en los nueve consejos populares del municipio», de acuerdo con el testimonio del Director de Inversiones del Ministerio de la Agricultura (MINAG) y representante del ministro del sector para el Programa de Atención a Diez de Octubre, Luis Enrique Díaz Burón.
Cubadebate aseguró que el programa de reparaciones está enfocado en los consultorios médicos, farmacias, unidades de comercio, círculos infantiles, escuelas primarias, mercados agropecuarios y parques de la zona.
El funcionario comentó que se encuentran directivos del organismo y de los grupos empresariales encargados en los consejos populares a tiempo completo para supervisar las obras.
El medio de prensa estatal indicó que el despliegue del plan de reparaciones comenzó el pasado 24 de julio, reconociendo que no se hubiera ni pensado en llevarlo a cabo de no ser por el estallido de las manifestaciones civiles.
“Es una decisión del país. El presidente planteó que existen problemas acumulados. Los sucesos del 11 de julio nos movieron el pensamiento y tenemos que reconocer que estos problemas de tiempo hay que atenderlos porque las personas quieren mejorar su calidad de vida”, reconoció Oscar Labrador Llanes, director de Forestal, Flora y Fauna Silvestre del MINAG.
El directivo ahondó en que la amplitud del proyecto era tan vasta que, el 31 de julio, la dirección de la provincia decidió asignar un grupo empresarial a cada Consejo Popular, y el municipio Diez de Octubre quedó designado como responsabilidad del Ministerio de la Agricultura.
“No vinimos a intervenir, sino a apoyar a las autoridades del Consejo porque son ellas las que conocen los problemas de la comunidad, los casos sociales. Lo que hacemos es sumarnos a posibles soluciones y contribuir en el apoyo logístico. Queremos que, lo que se haga, se haga bien”, aseguró.
“Se aprecia una transformación en el actuar de la gente”, añadió Labrador Llanes, reconociendo que al principio los vecinos se mostraban escépticos frente a la intervención. “Todavía existen algunos reticentes, pero ya se le están dando elementos con hechos: el asfalto de calles, el trabajo en escuelas, bodegas, la reanimación de la red de mercados agropecuarios que es una prioridad para el MINAG en el municipio. Algo en lo que se nos ha insistido en la dirección del Ministerio y del gobierno, es que lo que se haga tenga sostenibilidad en el tiempo. Eso se logra también si la comunidad participa”, concluyó.
El Jefe del Departamento de Gestión de Calidad de Tabacuba, Luis Felipe Milanés, aseguró que el acompañamiento a las comunidades ya continuará como una tarea permanente. Su entidad está encargada del barrio de Jesús del Monte.
En medio de una crisis general sin precedentes, marcada por una profunda escasez de cualquier recurso imaginable, el Gobierno de Miguel Díaz-Canel ha tratado por todos los medios de lavar su imagen de dictadura violenta y represiva, maquillar los problema sociales para pretender que hay interés por darles solución, y desviar la atención de la población de sus reclamos para aplacar las tensiones y el descontento popular.


