El joven que fue fotografiado por Yamil Lage, corresponsal de la agencia France Press, cuando era violentamente detenido por las fuerzas policiales del régimen cubano durante las protestas del pasado 11 de julio (y cuya imagen se volvió viral en redes) ha sido identificado como Rolando Remedios Sánchez, habanero de 25 años de edad.
Alberto Remedios Abreu, hermano de la víctima, aseguró que Rolando simplemente se presentó a la revuelta en el Capitolio de La Habana para protestar de forma pacífica contra el Gobierno cubano, sin haber sido pagado para manifestarse, sin ser un «delincuente» (como los medios de prensa oficialista lo tildan).
Afirmó que su hermano asistió voluntariamente a la manifestación para exigir «un país libre, con oportunidades, dónde se te respete por pensar diferente»; quien ha sido encarcelado injustamente hasta la fecha, «sin ningún tipo de derecho a defenderse legalmente».
La organización independiente Cubalex confirmó que Rolando fue detenido en el Capitolio y trasladado al penal de Jóvenes del Cotorro, donde continúa bajo custodia policial.
Anamely Ramos González, reconocida activista y miembro del Movimiento San Isidro (MSI), contó que el joven había visitado la sede del colectivo de artistas en más de una ocasión para compartir y debatir sus ideas.
Ella, sus familiares, allegados y todo el pueblo de Cuba ya se encuentra activamente abogando por su inmediata liberación.
Las burdas agresiones físicas contra los manifestantes del 11J fueron documentadas tanto por reporteros de prensa extranjera acreditados en el país como por la propia ciudadanía con sus celulares, y, a pesar de los constantes cortes del servicio de Internet en la isla y de los numerosos intentos del oficialismo por ocultar la verdadera cara del Gobierno cubano durante los disturbios, las evidencias de la represión del régimen contra la población han logrado salir a la luz.
Leonardo Romero Negrín, estudiante de la Facultad de Física de la Universidad de La Habana, también fue recientemente identificado como el protagonista de la otra icónica fotografía tomada por Yamil Lage durante las revueltas, siendo detenido (de igual forma) con gran violencia.
Leonardo (22 años) ofreció declaraciones para La Joven Cuba, donde denunció las sórdidas golpizas que él y los otros reclusos recibieron durante su detención.
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