La prensa oficialista cubana afirmó que las extensísimas colas que se producen en toda Cuba actualmente no son más que una muestra de que la población de la isla cuenta con el dinero para poder comprar, sin ninguna mención de que, de hecho, los cubanos no tienen más opción que esperar durante muchas horas para entrar a un establecimiento comercial sin la garantía de poder adquirir bienes básicos para su supervivencia.
El periódico Granma, órgano oficial del Partido Comunista de Cuba (PCC), aseguró que el poder adquisitivo de la población cubana es suficiente para poder comprar productos y por eso es que hay colas kilométricas por toda la geografía de la isla, cuando en realidad es todo lo contrario, pues el poder adquisitivo de la población cubana decayó significativamente cuando la estatal Tarea Ordenamiento fue impuesta en enero pasado.
Las colas son solo una obligación más para un pueblo deprimido e inmerso en una crítica situación económica, el peor escenario vivido en la isla en 30 años.
El diario señaló desde su cuenta de Twitter que «en el año 1953 tampoco había colas en Cuba. Ni para la carne ni para el pan. Para que haya cola, tiene que haber muchas personas con suficiente dinero para comprar».
El narrador y ensayista Antonio Rodríguez Salvador fue el autor del texto a donde pertenece ese fragmento, artículo publicado este domingo, donde se volvió a comparar la Cuba de ahora con la anterior al triunfo revolucionario en 1959, destacando la pobreza y desigualdad que existía entonces (como si no existiera ahora, aunque sea diferente).
A propósito de la celebración de un aniversario más del asalto al cuartel Moncada por Fidel Castro y su camaradería el 26 de julio de 1953, Rodríguez señaló que en aquel momento no había apagones en la ínsula porque el 56% de las casas «se alumbraban con lámparas de luz brillante», tratando de aplacar las críticas por los constantes cortes eléctricos sucedidos en los últimos meses en Cuba.
Ante tal desfachatez, los comentarios de rechazo popular se extendieron por las redes sociales, pues el texto trataba de comparar los escenarios cubanos como si el actual fuera mejor, aunque se supone que Cuba vivió una Revolución hace 62 años para que el pueblo no sufriera la misma miseria del pasado.
Un usuario cuestionó el cinismo y la mentira con que fue escrito ese mensaje. «¿Cómo se puede decir eso y seguir ahí, respirando como si nada?», apuntó.
Un periodista recalcó que el equipo de la versión digital del periódico Granma debería revisar esa publicación, ya que la forma tan «catastrófica» en que utilizaron un fenómeno tan complejo como el de las colas en el país justo en la conmemoración del 26 de julio.
Otro internauta indicó que, en ocasiones, le parece que las personas que escriben este tipo de comentarios en órganos oficiales «son más contrarrevolucionarios» que aquellos que piden cambios para la isla, identificándose dentro de este último grupo. Llegó incluso a preguntar: «¿En serio tienen algo en la cabeza o las palitas de tierra que estaba cargando Díaz-Canel hoy era para rellenarles el coco?».
Alejandro Sánchez, activista por la democracia, rememoró la fecha en que Fidel Castro asaltó el cuartel Moncada, alegando que en aquel momento se «perdió» en la ciudad en la que había estudiado. «Luego se escondió debajo de la sotana del arzobispo. Esto sí es Vivir del Cuento», señaló.
Otro usuario aseguró que ignorar la realidad solo logra agravar los problemas, y es por eso que a las autoridades «les va a explotar otra protesta más grande que la del pasado 11J».


