El servicio de internet fue bloqueado en la isla por parte del Gobierno del país a raíz de las protestas sociales que centenares de cubanos protagonizaron en respuesta a un panorama económico y sociopolítico que aparentemente ya no pueden tolerar.
La plataforma NetBlocks, la cual se dedica al monitoreo de internet a nivel global, indicó que «las métricas muestran que las plataformas de comunicaciones WhatsApp, Facebook, Instagram y algunos servidores de Telegram están siendo bloqueadas por ETECSA (Empresa de Telecomunicaciones de Cuba, S.A.)».
Usuarios reportaron interrupciones en el servicio desde horas de la tarde del domingo, según NetBlocks, en donde se resaltó la cualidad de monopolio de la compañía ETECSA al constituir «la única empresa de telecomunicaciones de Cuba, propiedad del gobierno, y que también opera la red celular de Cubacel».
La sociedad civil cubana ha hecho de las redes sociales una de las principales herramientas de denuncia, aunque los eventos nombrados 11J ya las han convertido en una de las primeras fuentes de periodismo ciudadano en la isla.
El apagón deliberado de conectividad impidió que se hayan divulgado muchas imágenes acerca de la represión desatada a continuación de las protestas espontáneas.
NetBlocks señaló que las métricas de rendimiento corrobora «que los servidores frontend y backend de las plataformas en línea enumeradas se han vuelto parcial o totalmente indisponibles en líneas fijas y celulares en Cuba, lo que corrobora informes de usuarios generalizados». Los datos, por tanto, confirman «la interrupción parcial de las redes sociales y las plataformas de mensajería en Cuba a partir del 12 de julio de 2021».
El portal independiente YucaByte denunció que el servicio de internet fue suspendido en toda Cuba, no solo en las áreas donde se estaban desarrollando las manifestaciones.
El tráfico en la web en toda la isla se redujo a cero, de acuerdo con lo reportado por la compañía Kentik.inc, también dedicada a registrar estos parámetros a nivel global.
Los internautas desde Cuba siguen quejándose sobre el bloqueo de redes sociales e interrupciones en el servicio, a consecuencia de la estrategia desarrollada entre la Seguridad del Estado y ETECSA.
Los datos sobre los horarios en que fueron bloqueados por las autoridades cubanas los servicios de Telegram, Whatsapp y Signal se pueden encontrar en la web del Open Observatory of Network Interference (OONI), proyecto de software libre cuyo objetivo es potenciar la descentralización para incrementar la transparencia sobre los actos de censura de Internet en el mundo.
Otras organizaciones como el Center for Applied Internet Data Analysis (CAIDA) también dieron parte del corte de conectividad, que se ha convertido en parte del modus operandi del Gobierno cubano ante protestas civiles, como las relacionadas con el 27N y el Movimiento San Isidro (MSI).
YucaByte dijo que al Gobierno confirmó lo que hace una semana negó ante las Naciones Unidas. En ese instante, rechazó los postulados del informe del relator especial sobre el derecho a la libertad de reunión pacífica y asociación de la ONU, Clément Voule, cuando este incluyó a Cuba entre los gobiernos que violan los derechos digitales de sus ciudadanos.
Gobierno cubano achaca a la «crisis» el corte del servicio de Internet
El monopolio estatal de las telecomunicaciones Etecsa no ha dado ninguna explicación, y tampoco el Gobierno hasta que ayer el canciller Bruno Rodríguez, sin más detalles, comparó el apagón a «las interrupciones de la electricidad» y las «dificultades evidentes en la alimentación» o el transporte.
«Estos días ha habido falta de fluido eléctrico que repercute también en el funcionamiento de las redes, los nodos, los servidores y las telecomunicaciones», indicó, y agregó más adelante: «en un país en que tenemos una situación de falta de medicamentos agudizada, es verdad que faltan datos pero faltan medicamentos también».


