Familiares de la cubana Myriam Blank Caspi Notkin, quien desapareció en el trágico colapso parcial del condominio Champlain Towers en Surfside (Miami Beach, Florida), durante la madrugada del último jueves, han denunciado haber recibido algunas llamadas telefónicas desde el número del teléfono fijo de su vivienda desde la noche del jueves y el viernes.
Ambos Myriam y su esposo, Arnie Notkin, se encuentran aún entre el estimado de más de 150 personas desaparecidas en el accidente. Lo más inquietante no es el no saber si fallecieron o no, sino sufrir el acoso de estas llamadas provenientes de un apartamento inexistente, uno de los que quedó totalmente destruido por el derrumbe.
Jake Samuelson, nieto de la pareja, explicó que la cubana y su marido vivían en el apartamento 302. El joven precisó que la línea telefónica fija de la vivienda solía estar junto a la cama del dormitorio, desde donde se han producido las llamadas que la madre de Jake ha recibido.
Han tratado de contestarlas, pero solo se escucha un constante sonido estático al otro lado de la línea. Detallaron que la primera ocurrió a las 9:50 p.m. en la noche del jueves, para un total de 16 comunicaciones.
Samuelson aseguró que la primera llamada fue recibida por toda la familia, pues entró cuando todos se encontraban en la sala de estar de su vivienda.
El teléfono móvil de Diane, hija de Myriam y Arnie, recibió 15 llamadas más para la mañana del viernes.
Las autoridades se encuentran investigando el caso, mientras ellos han solicitado los servicio de un detective y han pedido a las familias de otros accidentados que les avisen en caso de recibir llamadas de este tipo.
No han recibido más llamadas desde la noche del viernes. Myriam es banquera y agente de bienes raíces y Arnie es profesor de educación física.
En Surfside, Miami Beach, las tareas de rescate han permanecido ininterrumpidamente. La Policía del condado informó sobre el descubrimiento de los restos de un quinto fallecido en la tragedia.
Este sábado de encontró el cuerpo. Los especialistas analizaron muestras de su ADN para proceder a identificar a la víctima, y los resultados serán cotejados con las muestras que se recogieron en el centro de reunificación familiar.
Entre los desaparecidos del siniestro se halla un integrante de la Brigada 2506 que participó en la invasión a Bahía de Cochinos en 1961, el cubano Juan Alberto Mora Chávez, junto a su esposa Ana Mora y su hijo Juan Jr..
Los octogenarios Antonio (83) y Gladys Lozano (79), matrimonio de cubanos que residía en el apartamento 903, también se encontraban desaparecidos tras el colapso. Su cuerpos fueron identificados.
El derrumbe también incluye, entre los desaparecidos, a los cubanos Hilda Noriega y Oresme Gil Guerra. Con 92 años, Hilda residió en el edificio por más de 20 años.
