William Pérez González, vicejefe de la Aduana General de la República de Cuba, explicó al periódico Juventud Rebelde que las autoridades de la isla han decomisado 30.461 kg de drogas, 50 sellos de LSD con 200 dosis y 14.030 semillas de marihuana desde que comenzó la pandemia.
El funcionario aclaró que, originadas mayormente en Estados Unidos, las principales drogas requisadas en Cuba son la marihuana, la cocaína y el cannabinoide sintético. Por el intento de entrada al país ilegal de estas sustancias, fueron capturadas 49 personas, de las que han sido 37 nacionales y 12 extranjeras.
Pérez González mencionó que el tráfico de drogas por la vía marítima ha aumentado a raíz de la restricción de vuelos por la pandemia, por lo que 28 operaciones de tráfico internacional se han visto frustradas entre el año pasado y este semestre.
Sin embargo, señaló que continúa habiendo la principal incidencia en el canal aéreo, además de la carga internacional y el canal postal, y que las sustancias se destinan al mercado interno.
Afirmó que solo uno de los casos percibidos tenía como destino un tercer país, por lo que alertaron a las autoridades españolas de «la presencia de 18,8 kg de cocaína en el equipaje de un pasajero que permaneció de tránsito en el aeropuerto de La Habana, la cual fue incautada».
Las nacionalidades, las rutas empleadas por los correos para evadir los controles y los países de origen de la droga han demostrado cierta diversificación, según apuntó Pérez González.
Agregó que se evidencia una relación entre la actividad de drogas y otros ilícitos transfronterizos como el tráfico de mercadería. Para introducir el cannabinoide sintético, por ejemplo, se utilizan agencias de envío de paquetes desde Estados Unidos, y la sustancia se trafica en frascos de perfume, ambientadores y condimentos secos.
Puntualizó que se han identificado nuevas drogas sintéticas, así como el uso de cigarrillos electrónicos con sustancias ilegales para consumir. Además, han reportado 181 casos de consumo en ciudadanos foráneos que llegaron al país por la vía aérea. En estos casos detalló que se siguieron los protocolos de actuación.
Precisó que se detectaron drogas en tres contenedores cubanos de exportación de carbón vegetal rumbo a Europa, aunque la introducción de las sustancias sucedió en otros países de la región mediante un método llamado «gancho ciego».
Adelantó que recibirán, en el último trimestre del año, equipos adquiridos a través de un donativo chino, con una ejecución total de 16,3 millones de dólares.
Estos forman parte del Proyecto de Modernización Tecnológica de la Aduana. El aporte consistirá de 32 equipos especializados, que se añadirán a los 85 ya existentes, entre los que se encuentran los detectores de droga ingerida, que tendrán como destino los aeropuertos de Santiago de Cuba y Camagüey.
