La célebre presentadora de televisión cubana María Victoria Gil (Vicky), mejor conocida por tantísimos años de labor dando imagen al programa «De la Gran Escena», afirmó que su hermano, el actual ministro de Economía Alejandro Gil, nunca ha aceptado ni querido aceptar prebendas del Gobierno cubano.
Vicky ofreció estas declaraciones cuando concedía una entrevista al presentador y periodista cubano Abel Álvarez, desde su programa online «Abel en cualquier parte» (con sede en Los Ángeles, Estados Unidos).
Álvarez recordó antes de comenzar con su cuestionario que Vicky constituye una de la personalidades de la televisión de Cuba más queridas por el pueblo, una profesional que acarrea muchísimo respeto y admiración.
La entrevista no estaba acentuada en el papel de su hermano Alejandro, el actual ministro de Economía de Cuba, sino en preguntas de interés general sobre la presentadora, pero la polémica figura política de su familiar afloró espontáneamente en algún punto de la conversación.
Vicky aseguró que su hermano continúa viviendo en el mismo apartamento donde ellos se criaron, heredado de sus padres, porque «no ha querido aceptar prebendas del Gobierno cubano; no ha querido aceptar casas, coches, beneficios».
María Victoria precisó que Alejandro ahora vive en ese apartamento porque ella se lo cedió cuando viajó a Cuba en 2019 y lo vio viviendo en pésimas condiciones.
Contó que le pareció justo donarle su propiedad porque es tan de él como suya, al ser herencia familiar, y allí Alejandro vive con modestia.
Vicky alegó, en respuesta a una interrogante sobre cómo afecta sus lazos con su hermano a su actual vida en Estados Unidos, que algunos periodistas «que no tienen ética suficiente» han cuestionado el mérito propio de sus logros en calidad de vida fuera de la isla.
Afirmó que esas personas han contando que ella vive en el país norteño gracias al dinero que Alejandro roba en la isla, en medio de una de las peores crisis económicas de Cuba en los últimos 60 años. A eso respondió que sus propiedades actuales han sido producto de su propio esfuerzo, cargando además con una hipoteca al tener 64 años de edad.
También mencionó que algunas de las personas que la reconocen lamentan que sea hermana «de un ladrón y de un corrupto», pues la admiran mucho.
Explicó que este tipo de sucesos la afligen, pues asevera «desde lo más profundo de su corazón eso no es cierto», incluso cuando no duda que ese sea el caso de otros políticos y funcionarios cubanos.
Vicky aseguró que el ministro se encuentra creando las bases progresivamente para que se desarrolle la iniciativa privada, alegando que Gil es «un convencido que quiere cambiar todo lo que debe ser cambiado en nuestro país. Cuba ha llegado al principio del fin de un sistema».
Indicó que su hermano es consciente de que «el pueblo cubano no tiene vida», y es por ello que tiene fe absoluta puesta en él.
Álvarez indicó que no resulta nada fácil creer en el funcionario dada la situación de desespero en la que viven muchos cubanos, agravada por las medidas económicas.
Recientemente, se hizo eco en redes sociales sobre la gestión de Gil Fernández en la colocación de sus hijos (con Gina González García, Gerente Comercial de la disquera Bis Music) en puestos clave en el Ministerio de Comercio Exterior: Alejandro es especialista de Ventanilla Única de Comercio Exterior (VUCE), la oficina que media todas los intereses de empresarios extranjeros acerca de invertir en el país, y Laura María es especialista del Departamento de Importaciones, donde atiende proyectos de colaboración, servicios comerciales y comercio electrónico.
Luego de varias décadas en «De La Gran Escena», compartiendo profesionalmente con Abel Álvarez, Vicky se hizo ciudadana española y vive desde hace seis años en Tenerife junto a su hijo.


