En silencio total, y sin mención alguna en la prensa oficialista, el Gobierno cubano se ha embolsado 714 millones 121 mil dólares de parte del Departamento de Defensa y Veteranos Militares (DDMV, por su siglas en ingles) de Sudáfrica, en pago a la reparación de equipamiento militar, como parte de un proyecto entre ambas naciones bautizado Thusano.
La información trascendió en la prensa sudafricana, y ascendió a mil millones de Rand, un monto que ha sido totalmente ignorado por los medios de comunicación cubanos.
El propio portavoz de Ministerio de Defensa de Sudáfrica, Kobus Marais, ofreció una entrevista al diario News24 en la que dijo que la industria militar nacional atraviesa desde hace año «una espiral de muerte y pérdida de empleos», por lo que no se entendían las razones que tuvo el Gobierno sudafricano para autorizar el contrato con Cuba y desembolsar tal cifra millonaria en realizar trabajos que pueden ser hecho por contratistas locales y menor precio.
“¿Por qué el gobierno subcontrata el trabajo de mantenimiento de la Defensa a expensas de la industria de defensa local, donde muchos se encuentran en una espiral de muerte y la pérdida de puestos de trabajo, en todos los sectores de la actividad económica, es una preocupación constante”, preguntó.
El proyecto Thusano comenzó en el año 2015 y lleva siete años de desarrollo. Los pagos anuales realizados por el trabajo cubano son de R6,1 millones (2015), R143,9 millones (2016), R170,6 millones (2017), R274,6 millones (2018), R219,6 millones (2019), R252.4 millones (2020) y R9.5 millones hasta la fecha para 2021. Teniendo en cuenta que 1 millón de Rand son aproximadamente 72 mil dólares, es fácil sacar cuenta de la cifra que ha llegado a las arcas estatales durante este tiempo.
Marais calificó la decisión de utilizar la experiencia cubana, a diferencia de la sudafricana, en la forma del Cuerpo de Servicios Técnicos del Ejército de las SA (TSC) «inexplicable».
“Los más de mil millones de rands gastados en Cuba por el Departamento de Defensa y Veteranos Militares (DoDMV) es solo uno de los muchos casos en los que el gobierno derrochó el escaso dinero de los contribuyentes en servicios disponibles localmente”, dijo, y agregó que era “hora” de que Sudáfrica tuviera «una conversación nacional genuina sobre cómo el gobierno está utilizando los fondos de los contribuyentes para financiar una amistad ideológica” con el país caribeño.
