La compañía Aerovaradero S.A. anunció recientemente que comenzará desde el lunes 17 de mayo a ofrecer servicios de entrega de paquetería puerta a puerta, y dio a conocer también los precios que por ahora se les aplicarán «de forma experimental».
Directivos de la empresa estatal cubana especializada en el traslado de carga aérea, declararon al periódico oficialista Granma que este servicio solo se implementará en La Habana en esta primera fase. Gracias a dicha oferta, ningún destinatario tendrá que presentarse en las oficinas de la entidad, sino que recibirán los bultos de «forma segura y rápida» en sus domicilios.
La nota informó que las tarifas, por ahora, serán cobradas al cliente en Cuba, y que ellas se aplicarán independientemente de los cobros referentes a trámites de Aduana (50 CUP) y de aranceles (que pueden superar los 200 USD si se exceden los límites exentos de pago: 30 USD o 1,5 kg).
El precio del transporte del servicio no variará en dependencia de la zona: los residentes en los municipios como Boyeros, Arroyo Naranjo, Diez de Octubre, Cotorro y San Miguel del Padrón tendrán que abonar 0,33 CUP por cada bulto de 1,5 kg.
La tarifa en CUP será de 0,30 por paquete para los habitantes en los municipios de Centro Habana, La Habana Vieja, La Habana del Este, Guanabacoa y Regla, y para aquellos que residen en Plaza de la Revolución, Playa, Cerro, Marianao y La Lisa consistirá en 0,23 CUP.
Eduardo Rivero, director general de la entidad, señaló que se mantienen los despachos en persona, de manera que los clientes no incluidos en el servicio de prueba tendrán que esperar su turno para recoger el bulto en los puntos determinados para ello.
Como parte de Cubana de Aviación, la compañía estatal cubana Aerovaradero ha sido objeto de numerosas quejas desde el año pasado debido a las monumentales demoras en la entrega de envíos, períodos que han llegado a superan el año de retraso.
Asimismo, a finales del pasado año fuerzas de la Policía aprehendieron a un conjunto de empleados de la empresa acusados de robar mercancía enviada por vía aérea a la isla, que incluía ocho splits, televisores, ordenadores, un minibar, equipos de música, vestimenta y calzado deportivo para atletas de alto rendimiento, etc.
Según el agente que encabezó el operativo, una cantidad indefinida de personas del personal de tierra, además de conductores de la empresa Mercedes Benz que transportaban la carga, tenían un acuerdo para hurtar los artículos antes mencionados.
