El Noticiero Nacional de la Televisión Cubana reconoció en su emisión estelar que las millonarias importaciones de alimentos que realiza el Gobierno cada año no satisfacen las necesidades de la población.
El reportaje resumió la reciente comparecencia presidida por Manuel Marrero Cruz (primer ministro) destinada a evaluar la situación actual de las empresas estatales del sector de la agricultura, las que solo gestionan el 27% de la tierra y generan el 22% de la producción nacional de alimentos.
Haciendo alusión al paquete de medidas que el Gobierno implantó recientemente para impulsar la producción de alimentos en el territorio, Marrero aseguró que la dirección nacional no piensa seguir sosteniendo o creando empresas estatales para que dependan totalmente de los productores particulares y solo se mantengan a flote gracias a ellos, pues para eso se podría trabajar con los campesinos de forma directa.
El Gobierno cubano pretende potenciar la eficiencia y el desarrollo del sector empresarial estatal del país, para solucionar la gave crisis alimentaria en Cuba.
Aseveró que es inconcebible que las empresas no rompan con las trabas y las burocracias que entorpecen e interrumpen los procesos de comercialización, ya que son comunes las quejas de los campesinos sobre tener producciones y que nadie se las compre.
El funcionario precisó que la dirección general del país pretende eliminar y simplificar procesos para que hasta los productores privados más pequeños puedan vender sus alimentos a los puntos de venta más cercanos.
El Estado cubano importa millones de dólares anualmente en alimentos que podrían ser de producción nacional si no se interpusieran tantas restricciones al trabajo de los agricultores.
Las dificultades en el pago que debía propinar el país en el último año desencadenaron que decayeran en un 30 y 40% las importaciones de sus socios principales, que son China, Venezuela y España.
La isla importó de enero a mayo del pasado año un valor de 81.6 millones de dólares en pollo y otros productos provenientes de Estados Unidos. El economista Pedro Monreal precisó que el 94,7% del total de esa cifra se basa en cinco elementos: pollo, maíz, fosfatos, soya y tractores.
Los números han sido motivo de asombro para muchos cubanos, pues la población lleva casi un año soportando interminables colas para la comercialización limitada del alimento.
Las autoridades implantaron el mes pasado un paquete de 63 medidas destinadas a recuperar la producción en un escenario de desabastecimiento de artículos de primera necesidad y una subida radical de los precios, que fuerza al pueblo a sufrir largas colas frente a tiendas y mercados.
Las nuevas disposiciones adoptadas en el sector de la agricultura incluyen la comercialización de insumos, implementos y maquinaria en dólares.
Los agricultores, entretanto, continúan cuestionando el aumento en los precios de las tarifas eléctricas y de agua indispensables para su tarea, además de los impagos del Gobierno a sus producciones, y siguen quejándose sobre la pérdida de cosechas enteras debido a los incumplimientos de los compromisos de recogida por parte de las empresas estatales.
La deficiente gestión del sistema estatal agrícola está colmada de normas absurdas que restringen todo un espectro desde el uso de la tierra hasta la comercialización de los productos. Los productores llevan muchos años demandando libertad de producción y y distribución de sus alimentos, pero la maquinaria burocrática sigue sin dar una solución definitiva a sus reclamos.
