Materiales de construcción como bloques, barras de acero y carpintería galvanizada, experimentarán un significativo aumento en sus precios a raíz de una decisión tomada por el Gobierno cubano y las entidades específicas encargadas de implementar la mal llamada ‘tarea ordenamiento‘.
Betsy Díaz Velázquez, ministra de Comercio Interior, informó sobre este proceso en la comparecencia de este viernes en el espacio televisivo Mesa Redonda, y lo justificó con su subordinación a la serie de ejecuciones que irán eliminando gradualmente la política de gratuidades y subsidios a los productos, para así «subsidiar solo a las personas necesitadas».
Luego de 3 meses de implementación de la reforma económica que decidió emprender el Gobierno en medio de la pandemia, se ha decidido incrementar el valor de 124 de los 550 tipos de materiales de la construcción que se comercializan en los puntos de venta especializados que existen en el país, a causa del incremento de costos de producción que han sufrido las industrias cubanas después del reordenamiento monetario.
Los productos áridos (arena, gravilla, piedra y polvo), el cemento y dos formatos de tanques de agua mantendrán sus precios subsidiados hasta el momento. El subsidio será parcial con un precio minorista de 9 CUP, y el tanque que permanecerá subsidiado será el de 55 galones, pero, en cambio, el de 1.000 litros se comenzará a cotizar en 105 CUP.
La ministra declaró también que los 49 materiales más demandados sufrirán un aumento (por fabricarse con componentes importados): cables eléctricos, clavos, herrajes, otros surtidos de tanques, cajas eléctricas y canaletas.
No obstante, se podrán otorgar subsidios de barras de acero, carpintería galvanizada, muebles sanitarios y latiguillos a las células básicas habitacionales que se estime que lo necesiten.
Entre los materiales que mantienen su precio se encuentran los azulejos, elementos de pisos y tejas de fibrocemento. No obstante, la titular aclaró que otros que originalmente habían sido reportados dentro del conjunto cuyo importe se mantendría estable, pero ahora sufrirán un aumento tras una revisión, teniendo en cuenta nuevos precios de transporte y electricidad.
Según la ministra, gran parte de los materiales de construcción superaban los precios minoristas que habían sido autorizados, reflexión a la que se llegó tomando en consideración un análisis llevado a cabo por el “sistema empresarial” junto a “la comisión que chequea la implementación de la Tarea Ordenamiento”.
La responsable admitió que la población ha estado muy inconforme con la reducción de ofertas, comentando que, sin embargo, en ocasiones existen los materiales y están a la venta, pero se preservan para los subsidiados o afectados por eventos climatológicos por decisión territorial o nacional.
Entretanto, Eloy Álvarez Martínez, el ministro de Industrias, esclareció que se han revisado fichas de costos y más de 20.000 precios en todo el sistema empresarial, detallando que el componente importado en la industria se encuentra entre un 50 y un 85%, algo que ha modificado el reajuste de precios.
René Mesa Villafaña, ministro de la Construcción, mencionó que el plan de producción de cemento para este año es de 1 millón 20 mil toneladas, ligeramente mayor que la cifra de 2020, así como que “este producto tiene un precio mayorista centralizado y mantiene el minorista vigente antes de la Tarea Ordenamiento».
¿Qué productos mantienen sus precios antes de la Tarea Ordenamiento?
Las transformaciones a la lista de precios saldrán en una actualización de la Resolución 139/2020, a emitir en los próximos días en la Gaceta Oficial.
“Lo que hemos hecho es una combinación de subsidiar personas y productos, en medio de un contexto muy complejo por el recrudecimiento del bloqueo, una industria dependiente de materias primas importadas y combustible que nos han hecho difícil alcanzar, exportaciones limitadas y en medio de una compleja situación epidemiológica mundial. Seguimos revisando y todo lo que baje y tenga mayor eficiencia será informado y se ajustará”, concluyó la ministra Díaz Velázquez.
Sin embargo, la realidad que habría que plantearle a la ministra y el resto de la camarilla de jefes del Gobierno es que estos materiales, a precios más o menos accesibles, se encuentran completamente desaparecidos y solo es posible comprarlos en el mercado informal.
Es difícil entender un reportaje sobre Acinox Las Tunas donde se refleja una cantidad determinada de acero (cabillas) y se habla de exportación cuando el mercado nacional está desabastecido. La ausencia en las tiendas de materiales esenciales como el cemento, los bloques y las cabillas genera un malestar y opinión desfavorable en la población. ¿Cómo cumplir la política de la vivienda de la que tanto se jactan las autoridades sin la presencia de materiales imprescindibles?
Hasta ahora, las intervenciones de manera general han sido descriptivas, sin explicar en números cuál será el abastecimiento real en las cadenas de tiendas, las medidas para mantener una oferta estable, etc. Todo parece indicar que este año transcurrirá en cuanto a materiales de construcción como hasta ahora y habrá que esperar al próximo.
