Luego de que el tema musical «Patria o Muerte por la Vida» de Raúl Torres haya resultado en más que un fracaso, un ridículo, la administración cubana y su gabinete de propaganda decidieron lanzar una segunda respuesta a la canción “Patria y Vida”, y ahora se trata de un vídeo musical que cuenta con la retorcida involucración de un coro de niños.
El título de esta nueva propuesta artística es “Patria y Amor!”, donde se muestran a los pequeños vistiendo camisetas con las frases impresas “Punto Cubano” y “Mayabeque”. La Aduana General de la República se dedicó a compartir este vídeo en Youtube.
Por supuesto, era de esperar que la letra de este nuevo tema atacara en reiteradas ocasiones a los supuestos intereses monetarios de los intérpretes de “Patria y Vida”.
Esta «iniciativa» contó con mucho menos presupuesto que la de Torres, y esto fue evidente en la pobre calidad audiovisual del trabajo y en la lamentable (y hasta espeluznante) producción y edición de efectos y de imágenes de archivo de Fidel Castro.
Los niños cantaban frases (por supuesto, impuestas) sobre «mancillar nuestras raíces», dirigidas a los artistas Descemer Bueno, Gente de Zona, Yotuel Romero y demás.
Esta canción reitera, una vez más, el mismo discurso caduco, necio y vacío con el que el Gobierno se lleva defendiendo por 60 años, añadiendo frases célebres que poco se asocian con el momento que vive Cuba en la actualidad, que ya no tienen ningún respaldo simbólico y que ya nadie quiere seguir escuchando. Obviamente, no faltó el rap, ese intento patético por luchar con las mismas armas del enemigo, aunque esas armas no se dominen.
En medio de la lluvia de críticas por todos los francos ante el estreno de «Patria o Muerte por la Vida», parece que, en el trayecto, el aparato propagandístico ha perdido el sentido del ridículo.
«Patria y Vida», en contraposición, ha gozado de buena aceptación entre el público, por el que el Gobierno cubano se ha apresurado a lanzar hasta injurias contra los autores, calificando de «jinetero» a Yotuel Romero, ex miembro del grupo Orishas.
Les preocupa tanto el revuelo que este miércoles fue detenido uno de los huelguistas de San Isidro, el activista Esteban Rodríguez, mientras andaba por una calle habanera escuchando la canción gracias a una bocina.
Por el momento, la controversia continúa, y se sabe que se pueden esperar cuantas réplicas hagan falta por parte de ambos bandos.


