El mes de febrero en Cuba ha sido un período catastrófico en cuanto a la situación epidemiológica causada por el virus de la COVID-19, pues se ha alcanzado el mayor número de contagios (22.187) y el mayor número de muertes por esta enfermedad (70) en el país. Esto ha sido confirmado por las autoridades sanitarias cubanas en la comparecencia televisada de la mañana de este domingo.
El director nacional de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública (MINSAP), Dr. Francisco Durán García, indicó que esta cifra de infección rebasa a la del mes de enero por 6.651 pacientes. En el primer mes de este año 2021 se reportaron 15.536 nuevos pacientes positivos al virus.
La escandalosa cifra de fallecimientos a causa de la enfermedad de febrero también superó por 36 personas a la del mes pasado.
Se informó que la mayor parte de las personas fallecidas eran mayores de los 60 años de edad. Este sector poblacional, al igual que el de las personas menores de los 20 años, ha experimentado un incremento notable en la incidencia de contagios en este período.
Ayer sábado, por ejemplo, se registraron 68 pacientes menores de 18 años, 447 entre 20 y 59 años, y 87 de más de 60. Junto a los 618 nuevos casos identificados el sábado, ocurrieron 4 muertes.
No obstante, ese total es el más bajo número registrado en las últimas semanas y señaló que se prevé que la cifra continúe descendiendo.
Durán aseveró que no significa, en cambio, que la percepción de riesgo no debe disminuir porque, como pasó en el anterior rebrote, la situación puede volver a empeorar fácilmente.
Los casos provienen de las 15 provincias, con La Habana, Camagüey, Granma y Artemisa a la cabeza de la lista.
El doctor confesó que los datos «dan deseos de decir lo logramos» debido a que la mayoría de los territorios tenían niveles de infección muy altos.
Sobre los decesos, comentó que las víctimas tenían entre 74 y 86 años de edad y que eran residentes en las provincias de La Habana, Mayabeque y Pinar del Río, dejando un total de 19 234 pacientes ingresados.


