El Transporte público, lo único que medianamente ha mejorado en La Habana con la pandemia

El transporte público en La Habana nunca ha sido un paradigma de orden, disciplina y constancia, pero antes de llegar la pandemia de coronavirus al territorio cubano, se vivió una de las peores etapas de Cuba en este sector (al menos, desde los años más duros de la época del 90). Sin embargo, el endemoniado caos que presentaba este sistema en la capital cubana hace poco más de un año, se ha desvanecido desde que se restableció la transportación intermunicipal en la ciudad.

Las paradas de ómnibus se presentan semi vacías la mayor parte del día. En las horas pico (de 7:00 am a 9:00 am y de 4:00 pm a 6:00 pm) se tornan complicadas, pero no se pueden comparar ni remotamente con las situaciones que presentaban antes.

Los inspectores se aseguran de no dejar subir a los vehículos más de las personas permitidas por las medidas sanitarias contra el virus de la COVID-19, y así se logra, en la medida de lo posible, mantener la distancia adecuada.

Alicia Medina, de 51 años de edad, cuenta que ya no tiene que esperar ni 15 minutos en lo que se sube a un transporte en el municipio Cerro para llegar a su trabajo en El Vedado. Afirma que «lo único que ha mejorado en esta ciudad después de un año de pandemia es el transporte».

Muchísimas gacelas, taxis, metro buses y rutas principales y alimentadoras del sistema capitalino de ómnibus urbanos, lograron vaciar en menos de 20 minutos la céntrica y populosa parada de 27 y G en la tarde de este miércoles.

Una muchacha que trabaja de camarera en un restaurante de la calle 23 compara con mucha simpatía el panorama de La Habana con el de New York, pues la calle se inunda con taxis amarillos a la hora pico, como en las películas que ilustran la cosmopolita ciudad.

Muchos habaneros prefieren trasladarse únicamente en gacelas, de la empresa Metrotaxi (cuyas tarifas se establecen por tramos fijos de recorrido), pues muchos solo necesitan del tramo de 5 CUP para llegar a su destino, y la guagua ahora vale 2 CUP.

La joven aseguró que los carros de la empresa CubaTaxi (negros y amarillos) nunca se detienen para cargar con clientes en plena calle porque están reservados para el servicio de hospitales desde que llegó la pandemia a Cuba.

Un trabajador de la empresa CubaTaxi explicó que esta es la única línea que están trabajando por el momento.

Además de ellos, la Agencia de Taxi también tiene carros circulando, aunque son mucho más caros, debido a que antes solo cobraban en CUC por estar dirigidos principalmente hacia el sector turístico, por lo que no son tan populares, pero aligeran la demanda.

Un empleado de esta agencia comentó que las tarifas continúan siendo las mismas, pero que la empresa ha «orientado arreglar los taxímetros» a los choferes.

Asegura que se le aplicará una multa de 5.000 CUP a los taxistas que incumplan con el cobro de las tarifas o adulteren los costes por primera vez, y serán definitivamente terminados los contratos de aquellos que reincidan. Los que no enciendan el taxímetro se enfrentan a una multa de 2.000 CUP, aunque otro chofer considera que no va a durar mucho y que los trucos acabarán asentándose como siempre.