El Gobierno cubano ha aclarado una serie de puntos sobre las medidas sanitarias que se le exigirán tanto a turistas internacionales como a los cubanos a partir del próximo 6 de febrero, tras su arribo a la isla. De acuerdo a una publicación realizada por el grupo estatal de turismo Gaviota S.A., manejado por las Fuerzas Armadas, estas exigencias variarán para los «turistas internacionales» y los cubanos, tanto los residentes en el país como en el exterior.
Para los turistas internacionales, que en este caso se consideran a aquellos que viajen dentro de los llamados paquetes de «todo incluido», tendrán que poseer el resultado de un test PCR negativo de la COVID-19 que se haya realizado con no más de 72 horas al arribo al país y que sea emitido por un laboratorio certificado en el país de origen.
De igual forma, tendrán que contar con una póliza de seguro médico que cubra el tratamiento de la COVID-19, la que en caso de no poseer podrán adquirir en el propio aeropuerto por un costo de 30 dólares.
A su arribo, también será de carácter obligatorio someterse a una test PCR, cuyo resultado se les proporcionará en un plazo de 24 horas. Durante ese tiempo, deben utilizar de forma obligatoria la mascarilla mientras disfrutan de su estancia en el hotel.
Si algún turista internacional llega a resultar positivo al coronavirus, en caso de ser sintomático se le trasladará para su ingreso en una institución médica, y todos sus contactos directos serán aislados bajo estricta vigilancia para cumplir con los protocolos higiénicos sanitarios.
En el que caso de que exista la necesidad de prorrogar su estancia en Cuba, se tendrá que someter a una nuevo PCR, el cual tendrá un costo adicional de 65 dólares o su equivalente en cualquier otra moneda libremente convertible.
En el caso de los cubanos, tanto para los residentes en la isla como en el extranjero, también deben portar a su llegar el resultado de un PCR negativo, realizado 72 horas antes del viaje.
Además, serán sometidos a la realización obligatorio de un PCR al arribo al país y otro al quinto día.
Las autoridades informaron que se retoma desde el 6 de febrero el «aislamiento institucional» de los viajeros, por lo que los cubanos residentes en Cuba serán aislados en los centros habilitados en cada una de las provincias. Su estancia y transportación será libre costo.
Los cubanos que no son residentes, serán aislados en instalaciones hoteleras designadas en cada territorio. Estos viajeros si asumirán los costos de la estancia y transportación.
Los cubanos residentes también pueden optar por la opción de cuarentena en hoteles, pagando por la estancia y teniendo en cuenta que no podrán estar con sus familiares.
Para los viajeros en salida, se permitirá solo el conductor del medio de transporte que lo trasladó hacia el aeropuerto. Solo podrán acceder al interior de la terminal, los viajeros con sus boletos. En el caso de La Habana todas las operaciones aéreas se realizaran en la Terminal 3 del Aeropuerto Internacional José Martí.
