Un grupo de migrantes cubanos pagó entre 60 y 80 mil pesos mexicanos (aproxima mente entre 3000 y 4000 dólare) a agentes migratorios en México para que se “agilizaran sus trámites” en las oficinas del Instituto Nacional de Migración (INM) ubicadas en Tapachula, Chiapas.
Luis García Villagrán, integrante del Centro de Dignificación Humana, aseguró en declaraciones al diario Cuarto Poder que al menos unos 5000 cubanos hicieron lo antes mencionado aprovechándose de la corrupción que impera en la mencionada dependencia.
Los isleños necesitan visas humanitarias para poder moverse en territorio mexicano hacia la frontera de Estados Unidos, pero por diversas causas, como la pandemia de coronavirus, hay lentitud en los trámites.
García Villagrán añadió además que varios cubanos se acercaron a la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) para tratar de obtener el estatus de refugiados.
El entrevistado señaló que en estos momentos suman más de 60.000 los migrantes que se encuentran varados en Tapachula, luego de haber llegado en caravanas procedentes de Centro América el año pasado.
“Esas personas no tienen acceso a empleos y por ende, se quedan sin posibilidades de continuar su camino para lograr el sueño americano”, manifestó García Villagrán.
A pesar que una caravana de aproximadamente 9000 personas fue frenada en Guatemala, la cantidad de indocumentados varados en Tapachula podría incrementarse debido a que no son pocos los migrantes que intentan entrar a México por su cuenta.
Días antes de que saliera el contingente, miles de migrantes se formaron en dichas oficinas del INM para tramitar la visa humanitaria y la desesperación por obtener el documento trajo consigo un pleito a golpes entre cubanos y hondureños que suspendió las atenciones.
En los siguientes meses probablemente se incremente aún más la circulación de migrantes en México con la esperanza de que las medidas migratorias de Joe Biden faciliten la solicitud y elección de asilo en EEUU.
