Las tiendas en Moneda Libremente Convertible (MLC) que operan en el territorio avileño ahora ofertan variados insumos para la agricultura que el Gobierno cubano puso disposición del campesinado nacional. Pese a no cobrar en este divisa, esta es la única opción para adquirir utensilios necesarios para trabajar (botas, machetes, fertilizantes) con la que los productores independientes cuentan, mediante la provisión de la Empresa de Sumisitros Agropecuarios de Ciego de Ávila (ESACA).
Según el portal web del Gobierno de Ciego de Ávila, el Estado prevé comercializar en divisas fuertes 500 kg de electrodos, 285 pares de botas de PVC, 800 litros del fertilizante líquido CBFERT, 5 mil sacos de malla para la recogida de las cosechas, y 600 machetes.
El director de ESACA, Alcides Acosta, aseguró que esta lista de recursos fue demandada por ambos, productores agrícolas independientes y entidades estatales (como Agroindustrial D’Ceballos y Cultivos Varios La Cuba), con mucha antelación. El dirigente agregó que esta modalidad beneficiará y estabilizará próximamente el suministro de insumos agrícolas en las tiendas en CUP de los 10 municipios de la provincia.
No solo esas herramientas para la agricultura están en el plan de venta, sino también tractores, diferentes productos químicos y materiales de construcción. El funcionario también aclaró que los precios en la red de tiendas en MLC son equivalentes en todas las provincias.
Turisave y Nicosave son dos productos químicos de producción nacional que también se ofertan en estos establecimientos comerciales, eficaces en el enfrentamiento a plagas de tomate, frijol, ají y calabaza.
Esta medida de vender insumos a campesinos en MLC tiene carácter nacional. El Gobierno de la provincia de Las Tunas también hizo pública esta información el pasado 25 de enero.
El medio oficial Radio Rebelde comunicó que, a la vista, entre la mercancía que reposaba en la tienda se podían divisar tractores, motosierras, maquinarias para la labor, botas de goma y fertilizantes.
Asimismo, el campesino cubano, ya sea trabajador estatal o privado, cobra en Pesos Cubanos (CUP), no en MLC, por lo que resulta injusto obligar al productor a comprar sus insumos laborales en tiendas que operan con una moneda que ellos no tienen forma de adquirir (que no sea a través de remesas desde el exterior).
Toda esta maniobra forma parte de un desesperado intento del Gobierno cubano por recaudar divisas extranjeras a cualquier costo.
