Las autoridades de la provincia cubana de Artemisa realizaron inspecciones varias panaderías y encontraron irregularidades en cuanto al peso, precio e higiene de los panes ofertados.
Los resultados de la inspección fueron sacados a la a luz a través de un reportaje transmitido por la Televisión Cubana, donde detallaron que la primera de las panaderías visitadas fue la de “El Habanero”, perteneciente a la empresa alimentaria que elabora pan para unas 14.000 personas.
De acuerdo a las declaraciones de Mercedes Ibáñez, inspectora provincial de Artemisa, los panes del citado establecimiento estaban por debajo del peso establecido, ya que los que se suponía que pesaran 80 gramos solo pesaban 69, y el de 60 gramos estaba pesando 50.
A su vez, señaló que en la panadería en cuestión se detectaron también varias violaciones a las normas sanitarias para la manipulación de alimentos.
“Hay malas condiciones higiénicas en esta panadería, por lo que se procederá a notificar al turno en pleno por las violaciones de precios porque al final cae en una violación de precio ya que es una afectación al consumidor”, indicó Ibáñez.
En el caso de la panadería “La Palma”, las condiciones sanitarias de eran un tanto mejores, pero el peso del pan también estaba por debajo del establecido, al igual que el de las torticas que se venden a un peso.
Luego de observar el número de visitas a ambas panaderías y tomar en cuenta la diferencia de gramajes de cada unidad vendida, los inspectores calcularon que en cada turno de trabajo se estaban elaborando unas 4.000 unidades extra, lo que equivale a 5 costales de harina y 10 libras de aceite.
Lastimosamente, las unidades extra representan un beneficio claro para la panadería y sus trabajadores, pero no para la población que en los últimos días y como en muchas otras esferas, ha estado lidiando con la escasez de pan.


