Lo de 24 pesos cubanos por un dólar que había anunciado el Gobierno hace unas semanas como cambio oficial a partir del 1ro de enero parece no ser tal así, como han confirmado las propias autoridades bancarias en Cuba, que ahora se justifican con una supuesto «margen comercial» en la tasa cambiaria para ofrecer menos dinero por cada dólar comprado a la población y venderlo más caro en caso que alguien logre empatarse con uno.
Con evidente nerviosismo, la ministra presidenta del Banco Central de Cuba (BCC), Marta Sabina Wilson González, dijo ante las cámaras de la televisión estatal: «Bueno, el presidente (Miguel Díaz-Canel) cuando anunció el día 10 de diciembre… el comienzo de la Tarea (Ordenamiento) el día primero de enero, dijo que 24 pesos por un dólar, que era el tipo de cambio oficial y es el tipo de cambio que el Banco Central ha publicado en la página web».
Sin embargo, en la práctica no será tal cual, pues desde ahora todas las instituciones bancarias del país comprarán el dólar a la población por 23.50 pesos cubanos (CUP), y no por 24. A su vez, la venta del dólar será a 24.50 CUP, también alegando un supuesto margen comercial, que aseguró que «tienen todos los bancos del mundo».
«Es una práctica internacional y que lo hacen todos los bancos del mundo, que tienen como referencia la tasa de cambio que publican los bancos centrales de los países para después establecer las tasas de cambio que tienen un margen, que es un ingreso que tienen los bancos para poder establecer los tipos de cambio de compra y venta de las diferentes monedas libremente convertibles. Es parte de las utilidades de los bancos», comentó Wilson González.
Según el «esquemita muy claro» que mostró la ministra a los televidentes, hasta el pasado 31 de diciembre los bancos en la isla operaban con una comisión de 2.75%, lo que significaría que por cada dólar los cubanos recibirían a cambio 23.34 CUP. Pero, para no afectar tanto a la población, pues decidieron establecer un margen comercial para el cambio a partir del 1ro de enero de este año de 2.083%, lo que se traduce en que por cada dólar que alguien desee vender reciba 23.50 CUP, y los otros 50 centavitos se los queda el banco, que viene siendo el mismo Gobierno.
Este mismo margen comercial implica que la venta del dólar, cuando existan porque nunca hay en los bancos, será de 24.50 CUP, o sea otros 50 centavitos para su bolsillo.
«El banco cobra un margen comercial en el cambio del dólar por CUP que ha existido desde siempre, aunque antes tenía también el gravamen que se eliminó. Ahora las personas solo tienen margen comercial, porque antes tenían también el gravamen», explicó Wilson González, dejando claro que antes el suavanazo era mucho mayor aún.
En las redes sociales la tasa de cambio ha sido en los últimos días uno de los temas más debatidos entre los cubanos.
«Un incentivo más para la proliferación del mercado informal de dólares estadounidenses» y «el problema será qué anormal cambiará sus dólares con ustedes», opinaron varios cubanos en la página en Facebook del BCC.
