El Gobierno cubano anunció que reforzará desde el próximo 1ro de enero de 2021 las medidas higiénico-sanitarias contra la COVID-19 en todos los aeropuertos del país e instó a la población a reducir las visitas a las terminales aéreas.
Una nota de las autoridades aeropuertarias solicita «a la población abstenerse de acudir a las terminales aéreas en grupos a esperar o despedir familiares o amigos».
A través de la televisión nacional se enfatizó en la importancia de cumplir con estas acciones ante el alza de la tasa de incidencia de la Covid-19 en la nación debido principalmente a los casos importados.
En la información se pide «que solo asista una persona a recibir pasajeros y que durante la espera, en las afueras de las terminales, mantengan el distanciamiento social y una vez en el hogar cumplan las medidas sanitarias».
Además, la nota reitera que no está permitido el acceso de acompañantes al interior de las terminales y ‘en los accesos a las áreas del aeropuerto se reforzarán los controles adicionales para asegurar estas medidas en función de la salud del pueblo’.
De igual forma, se confirmó que a partir de enero de 2021, Cuba requerirá que todos los viajeros que lleguen a la isla presenten certificados de exámenes negativos de COVID-19.
Ahora, todos los viajeros deberán presentar un certificado de una prueba PCR negativa realizada 72 horas antes de su arribo a Cuba, según la oficina de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) en La Habana.
Científicos cubanos dijeron, junto al presidente Miguel Díaz-Canel en una reunión diaria, que los casos podrían alcanzar un máximo de 2 mil a mediados de febrero si se mantienen las condiciones actuales, publicaron medios estatales.
En todas las provincias ocurre “un crecimiento bastante acelerado del número de casos confirmados”, dijo Raúl Guinovart, decano de la Facultad de Matemática de la Universidad de La Habana. “Hay una nueva normalidad en el país, pero también debe haber una nueva normalidad para recibir a los visitantes”.
Según medios locales, algunos visitantes ignoraron la normativa y alrededor de dos tercios de las personas infectadas que llegan a Cuba transmiten la enfermedad, aunque se realicen una prueba al llegar al aeropuerto.


