La semana anterior fue la peor en Cuba desde el inicio de la crisis sanitaria por el COVID-19, con 641 personas diagnosticadas con el virus en el país. Esto fue indicado según palabras de José Ángel Portal Miranda, Ministro de Salud Pública, en una comparecencia del grupo temporal de trabajo para la prevención y control del coronavirus. La cifra se debe al gran número de arribos al país de viajeros contagiados.
La cantidad de diagnósticos de pacientes aumentó en un 16.8% en la última semana. Con respecto a la semana anterior, se reportaron 92 casos más. El 88.6% de los casos encontrados se concentraron en las provincias de La Habana, Santiago de Cuba, Matanzas, Pinar del Río, Villa Clara, Artemisa, Camagüey, Mayabeque, Sancti Spíritus y Guantánamo. El 45.5% de los casos autóctonos diagnosticados en ese período son contactos directos de viajeros.
Las provincias de Cienfuegos y Santiago de Cuba, gracias al reporte de casos positivos en sus territorios, retrocederán próximamente a la fase tres de la etapa de recuperación del coronavirus. Ambas provincias registraron durante muchos días consecutivos (Santiago de Cuba con 19 días y Cienfuegos con 16) indicadores pertenecientes a la fase tres. Santiago de Cuba actualmente da seguimiento a 108 focos y Cienfuegos a 23. Ambos mantienen un evento de transmisión local activo. Se juntan así con las otras provincias en situación sanitaria crítica.
Tras declararse el fin del evento de transmisión institucional que se mantenía activo en la provincia de Ciego de Ávila, el Gobierno cubano aprobó en la reunión del grupo temporal de trabajo para la prevención y control del coronavirus su avance a la nueva normalidad. Este territorio mantuvo estables los parámetros a evaluar durante varias semanas contiguas.
El peor momento de la crisis sanitaria por el COVID-19 en Cuba ha pasado parcial o casi totalmente inadvertido por el anuncio del inicio de la «Tarea Ordenamiento» y las regulaciones y reformas pertinentes desde el próximo 1ro de enero de 2021.
