Las autoridades del Consejo de Defensa Provincial de La Habana ordenaron el cierre inmediato y la suspensión de la licencia operacional a dos famosos bares en la capital del país que pertenecen a nietos del ex presidente Raúl Castro.
El primero de ellos es el Bar EFE, ubicado en la céntrica intersección de las calles 22 y F, en el Vedado habanero, el cual pertenece a Sandro Castro, uno de los nietos de Raúl más polémicos, por la vida de sibarita que presume en sus redes sociales.
De igual forma cerró sus puertas el Bar Mío & Tuyo, negocio que pertenece en parte a Raúl Guillermo Rodríguez Castro, conocido como El Cangrejo, nieto y guardaespaldas de Raúl Castro.
Ambos establecimientos, conocidos por su carácter «elitista», recibieron varias multas en las ultimas semanas por «violar la prohibición de funcionamiento de los bares, de la cual estaban informados», según explicó Reinaldo García Zapata, vicepresidente del Consejo de Defensa de La Habana, dejando claro que se les advirtió que no se les repondrá la licencia operativa hasta tanto la capital del país no pase a la fase de «nueva normalidad».
El Bar EFE estuvo el año pasado en el ojo del huracán, luego que un reconocido activista por los derechos de la comunidad LGBTI denunciara que había sido expulsado por el equipo de seguridad de esta instalación luego que se tomara una selfie besándose con su pareja.
Este sitio es visitado con frecuencia por parte de la farándula habanera, actores, pintores, personas que se mueven en los entresijos del mundo diplomático y los negocios privados.
En el Mío & Tuyo el ambiente es similar, y allí es normal ver a ‘El Cangrejo’ disfrutando del balcón exclusivo que mandó a construir para estar alejado del resto de los que asistentes que escogen el sitio para pasar la noche, y cuenta incluso con una entrada privada por donde entra y sale del bar sin ser molestado.
