El comercio en Cuba ha ido tomando fuerza durante los últimos años y hoy en día es algo de los que no pocos se benefician. Incluso, en los momentos más fuertes de la pandemia de coronavirus, permitió que se simplificaran no pocos procedimientos que estaban empantanados y que demandaban largas horas de colas.
Se facilitó el pago de diferentes servicios vía electrónica, entre ellos el agua, el gas, la corriente, compras en línea de los siempre polémicos combos, transferencias de saldo entre cuentas, recargas de móvil o cuentas de internet, entre otras.
No obstante, pese a las ventajas que el comercio electrónico representa en Cuba (y en cualquier parte del mundo), no está exento de sombras. Cada día se dan a conocer nuevos modus operandis de estafas que van desde la suplantación de identidad hasta los virus informáticos.
Desde hace algunos días a comenzado a circular en las redes sociales, una alerta sobre una estafa que consiste en tomar el control de una tarjeta de banco mediante el uso coordinado de las populares aplicaciones EnZona y Transfermóvil.
Las capturas de pantalla de conversaciones privadas donde algunos usuarios se han pasar por instituciones estatales para exigir datos personales, han incendiado aún más las redes sociales.
La estafa ocurre de la siguiente manera:
El estafador contacta con la víctima y le pide su número de cuenta transferirle el dinero. Al recibir el número, añade esa tarjeta a su cuenta de EnZona y como la aplicación exige un código para completar el proceso, entonces pasa a contactar por segunda vez al dueño de la tarjeta para solicitarle esta información.
El código mencionado se obtiene de las últimas operaciones que el usuario debe consultar mediante un cajero automático o la aplicación Transfermóvil.
Como el estafador no posee esa información, le comunica al usuario que ya realizó la transferencia. El usuario, al notar que no tiene el dinero reflejado se lo comunica, a lo que el individuo, haciéndose la víctima, pide que se le envíe una captura de las diez últimas operaciones.
Con esto el atacante ya tiene toda la información necesaria para hacerse con el control de la tarjeta y disponen de los fondos de esta.
Esta modalidad de estafa es fácilmente detectable, ya que EnZona exige que las operaciones se realicen desde direcciones IP Nacionales (no se puede usar VPN para los más entusiastas) y además se requiere que la cuenta esté asociada a un número de teléfono.
Sin embargo, en lo que logra aclararse el asunto y, aunque finalmente atrapen al estafador, es el dinero de la persona el que está “en el aire” y es muy poco probable que pueda recuperarlo.
Por estafas de este tipo, y un sinnúmero de variedades que existen, recomendamos a los usuarios de Cuba que tomen todas las medidas necesarias para proteger sus datos. A continuación, enumeramos algunas de ellas.
Utilizar sus datos únicamente para acceder a la plataforma www.enzona.net (compruebe siempre que el dominio coincida con el sitio oficial).
Use contraseñas seguras y doble factor
Cuidado con lo que compartes en redes sociales (Evita compartir información personal)
No ingreses tus datos en redes públicas
No abras enlaces ni descargues archivos enviados por desconocidos. Estos podrían ser virus o programas espías que buscan robar tu información.
