El Gobierno cubano advirtió a la población que los precios en la Isla cambiarán de un día para otro, como parte de lo que han dado a llamar «Tarea Ordenamiento» y que forma parte del fin de la dualidad monetaria.
Según reiteró Marino Murillo Jorge, quien está al frente de la Comisión Permanente encargada de la Implementación de los Lineamientos y por tanto de la unificación monetaria, la medida de será aplicada «el primer día de un mes», aunque no precisó fechas exactas, para permitir que todas las empresas estatales puedan cerrar sus estados financieros y abrir al siguiente día con un nuevo tipo de cambio oficial.
«Esto significa que el día primero de ese mes se amanecerá con los nuevos precios en todas las tiendas y, para que los trabajadores puedan hacer frente a este cambio, diseñamos un esquema de pago anticipado de los salarios», anunció.
Las empresas estatales realizarán el pago del salario a sus trabajadores tres días del mes anterior antes del día cero, y luego, correspondiendo con la fecha de cobro, se entregará la diferencia, explicó Murillo.
En el caso de los pensionados y los asistenciados sociales también se les aplicará el mismo método de anticipo de pago.
Todo parece indicar que el esperado día cero será el 1ro de enero de 2021, más sabiendo al Gobierno cubano le encanta esa fecha, haciéndolo coincidir de esta forma con el aniversario del triunfo de la Revolución de 1959.
Aunque las autoridades no han sido claras en cuanto a una fecha concreta para la entrada en vigor del ordenamiento monetario, en su discurso Murillo Jorge volvió a ser incisivo al advertir que este cambio implicará la eliminación de los «subsidios excesivos y gratuidades indebidas», así como una reforma salarial a todos los niveles, la cual promete aumentar de forma considerable los ingresos de los trabajadores, así como el sistema de pensiones y asistencia social.
Sin embargo, ese ordenamiento monetario y cambiario no estará libre de riesgos, según han reconocido las propias autoridades, sobre todo en una inflación que se espera que sea mayor que la esperada. De igual manera, un numero importante de empresas estatales se tendrán que declarar insolventes por el aumento del costo de las materias primas importadas y la aplicación de la reforma salarial.
Por estos motivos, el Gobierno ha propuesto que un grupo de productos y servicios mantengan precios centralizados, controlados y topados, entre los cuales hasta el momento hay más de cuarenta, entre los que destacan el combustible, energía eléctrica, agua y alcantarillado, cemento, azúcar, café mezclado, picadillo texturizado, de res y de pescado; compotas, leche, queso fundido, yogur de soya y natural, mortadella, pastas alimenticias, pan de corteza dura, salchichas de pollo, cigarros y la pasta dental.
