Gobierno cubano anuncia que la desaparición de la libreta de abastecimiento será «gradual», aunque desde el minuto cero, tras la unificación monetaria, van a dejar un grupo importante de productos sin subsidios
La libreta de abastecimiento tiene sus días contados, como anunció la pasada semana el gobernante Miguel Díaz-Canel, y ayer fue nuevamente confirmado por Marino Murillo Jorge, considerado el zar de las finanzas del Gobierno cubano y quien se encuentra al frente de la comisión encargada de realizar.
Sin embargo, su eliminación se hará de forma «gradual cuando la economía evolucione y haya oferta suficiente para determinados producto que se puedan vender fuera de este mecanismo de distribución», según afirmó Murillo Jorge, en el espacio televisivo Mesa Redonda.
Las autoridades consideran que la libreta de abastecimiento «es un mecanismo extremadamente costoso», sobre todo porque los precios de los productos que se ofertan a través de ella están fuertemente subsidiados por el Estado y luego que la población los compra este establecimiento se queda sin actividad gran parte del mes.
«Un porcentaje grande de los productos incluidos en la libreta de abastecimiento están disponibles en las bodegas desde el día primero de cada mes. Como tendencia, la población los compra en los primeros 15 días, quedándose prácticamente la bodega sin actividad durante el resto del mes. Como mecanismo de distribución y comercialización es extremadamente costoso», afirmó el funcionario.
Por otra parte, defendió que como mecanismo de distribución en la escasez ha demostrado tener «una eficiencia muy grande».
«En estos momentos, aún cuando algunos productos tú le quites el subsidio, es válido dejar la libreta como mecanismo de distribución. Es un instrumento que medio de la situación de escasez estamos viviendo que nos garantiza la distribución y dejar un grupo de productos subsidiados también es válido. Creo que usarla en estos momentos es válido», enfatizó.
La pasada semana Díaz-Canel anunció que la eliminación de la libreta de abastecimiento formaba parte del plan de reformas monetarias que se realizarán en Cuba en los próximos meses, adelantando que «cuando los mercados tengan otra situación tendremos que ir evolucionando para suprimirla».
<su eliminación preocupa a los cubanos, que reconocen que los productos son insuficientes pero al menos pueden acceder a alimentos básicos como el arroz y el azúcar a precios subsidiados una vez al mes, lo cual aligera por algunos días la carga económica en los hogares de la isla, especialmente de aquellos con menos recursos.


