El sonido de un metal doblándose fue lo que alcanzaron a escuchar en plena madrugada los vecinos de un edificio de tres pisos ubicado en la calle Lucena, entre San Miguel y San Rafael, en Centro Habana, antes que el inmueble se viniese abajo dejándolos sin nada.
“Eran más o menos las 3 y media de la mañana cuando uno de los vecinos, que se encontraba viendo el televisor, se puso a avisar a todos del ruido del edificio que iba cediendo poco a poco hasta rajarse. Por suerte le dio tiempo a todo el mundo a salir”, contó un residente de la zona.
“El perro estaba ladrando muy intranquilo y nadie sabía lo que estaba pasando”, comenta uno de los que lo perdió todo y a quien tan solo le dio tiempo de salir corriendo con lo que llevaba puesto.
En una esquina cercana al derrumbe, justo en frente de al consultorio médico, los habitantes que lograron escapar del derrumbe se concentraron con las escasas pertenencias que lograron salvar.
Los tristes rostros del grupo reflejaban el sentir de lo que llevan por dentro, ya que estaban conscientes que lo que les esperaba para volver a tener un techo propio bajo el que dormir no es nada fácil. En el mejor de los casos, terminarán en uno de esos albergues sobresaturados que existen en La Habana, donde muchos de los que viven en estos sitios ya llevan más de 10 años sin que se le dé respuesta a su situación.
Hotro derrumbe en la Habana está madrugada a las 3:40 am.
¡ Seguimos construyendo el socialismo ! #Cuba #PatriaYLibertad pic.twitter.com/fFB9OH7Bfq— Je Suis Victor (@PicadilloSoya) October 14, 2020
Los más suertudos del grupo quizás puedan irse a vivir a casa de algún pariente por algún tiempo, pero el dolor de ver su pedacito reducido a cenizas es muy fuerte. Algunos de los residentes de la zona intentan recuperar algún que otro trozo de ladrillo en la calle, mientras que los antiguos moradores les piden encarecidamente a las autoridades que velen porque nadie pase a la zona acordonada a intentar robarse las pocas pertenencias que quizás pudieron salvarse.
