El Gobierno cubano aclaró que «no hay fecha exacta por el momento para abrir los aeropuertos de La Habana», a pesar de que la llamada «nueva normalidad» puede que este próxima a iniciarse en la capital del país.
Las autoridades informaron un grupo de medidas que «no serán aplicadas con inmediatez» en La Habana, a pesar de estar incluidas en el plan de desescalada anunciado
«Hay un grupo de medidas que no serán aplicadas en estos momentos como la autorización de las operaciones aéreas en la modalidad de vuelo regular en el Aeropuerto Internacional José Martí. Es decir, que no serán abiertos los aeropuertos», indicó el Consejo de Defensa Provincial de este territorio.
Los vuelos nacionales si serán restablecidos de forma paulatina a partir del próximo 19 de octubre, siempre en dependencia de la disponibilidad de aeronaves de la aerolínea Cubana de Aviación.
De esta forma, La Habana mantendrá cerradas sus fronteras aéreas internacionales, como mismo lo harán Ciego de Ávila y Sancti Spíritus, estas ultimas aún en fase de transmisión autóctona limitada del coronavirus.
La decisión, de la que no se ofrecieron motivos reales que la justifiquen, entra en contradicción con lo informado por el propio Gobierno sobre la certificación de aeropuerto seguro que posee la terminal internacional José Martí desde finales de agosto para comenzar a operar vuelos comerciales.
Según un reporte transmitido ayer por la cadena Telemundo, las agencias de viaje con sede en Miami tienen previsto reiniciar sus operaciones a la capital cubana a partir del próximo mes de noviembre, pues fue el plazo dado por el Instituto de la Aeronáutica Civil de Cuba (IACC) para retomar este tipo de viajes internacionales.
Una vez retomados los vuelos, los pasajeros que arriben al país tendrán que llenar a su llegada un declaración jurada sobre su estado de salud, donde detallen cualquier síntoma que hayan sentido durante los últimos 15 días. Además, se les realizará un examen PCR a cada viajero, tanto cubanos como extranjeros.
«El extranjero va para el hotel y allí va a estar siendo observado hasta que se comprueba el resultado que no está positivo. Los cubanos, por su parte, no tendrán que ir a centros de aislamiento para pasar una cuarentena sino que lo harán en sus propios hogares», detalló la pasada semana el Primer Ministro cubano, Manuel Marrero Cruz.
