Una nueva aplicación para móviles, llamada Cola.cu, pretende poner un alto en Cuba a coleros y revendedores en las tiendas al registrar el lugar, la fecha y la cantidad de productos que compra cada cliente.
Desarrollada por la Universidad Tecnológica de La Habana José Antonio Echeverría (CUJAE), la aplicación ya cuenta con más de 3600 personas registrada en su base de datos en La Habana, y cada vez que finaliza una jornada los datos se sincronizan a nivel provincial y así se puede identificar fácilmente a los compradores reincidentes.
Según una nota publicada al respecto en el oficialista Granma, la aplicación brinda la posibilidad que la población puede tener un mayor acceso a los alimentos y productos de primera necesidad, ya que evita el acaparamiento de los mismos y hace que las colas sean mucho más pequeñas.
El citado medio añade que el Consejo de Defensa Provincial (CDP) considera que con esta nueva aplicación se podrán adoptar medidas de acuerdo a las características de cada localidad, atendiendo a criterios como el control de la repetición de personas en las colas, la restricción del tránsito entre municipios, entre otros.
En Cuba se estaba utilizando una aplicación similar para el mismo fin llamada Porter@. Esta aplicación se instalaba en el teléfono del organizador de la cola y cada persona debía presentar su carnet de identidad antes de acceder al establecimiento.
Porter@ fue desarrollada por programadores de la Universidad de las Ciencias Informáticas (UCI) y su objetivo es que sea utilizada tanto por porteros de las tiendas, como por oficiales de la Policía Nacional Revolucionaria para controlar que cada persona solamente pueda comprar una vez.
La situación económica en Cuba es alarmante en estos momentos, al punto que muchos la han comparado con lo vivido durante los años 90 durante el llamado Período Especial. Las largas colas en las afueras de las tiendas no solo demandan largas horas muchas veces bajo el sol o la lluvia, sino también la incertidumbre de si se llegará a alcanzar el producto deseado una vez que se logre entrar a la tienda.
Las autoridades cubanas libran una fuerte batalla en estos momentos en contra de los llamados coleros, a los cuales, tan solo en el primer mes de entrar en función los operativos para dejarlo fuera de las colas, se les impusieron 2334 multas y se le realizaron cartas de advertencia a otros 2604. Las sanciones por incurrir en este tipo de delito, rondan entre los 200 y los 3.000 CUP.


