La Isla de la Juventud se convertirá el próximo 1ro de junio en el primer territorio de Cuba en comenzar a flexibilizar las medidas tomadas durante la pandemia del coronavirus y entrará en la Fase 1 de la desescalada, tras 26 días sin reportarse casos positivos en todo ese territorio.
Según el reporte de la prensa estatal, desde las seis de la mañana del próximo 1ro de junio se autorizará nuevamente la entrada y salida a la ciudad de Nueva Gerona de todos sus habitantes.
Además, se permitirá la circulación de medios de transportes como motos, motorinas y bicicletas, siempre que se garantice que se están utilizando para gestiones de trabajo o uso personal. En el caso de los vehículos automotores de dos ruedas y autos ligeros podrán utilizarse en gestiones familiares, pudiendo transportar a más personas, siempre que tengan vínculos familiares.
A su vez, las camionetas y camiones solo estarán autorizadas para el trasporte de cargas de mercancías y no para trasladar pasajeros.
En esta primera fase de la desescalada se restringe el movimiento de personas mayores de 60 años y los menores de edad. Además, se prohíbe la circulación de la población en las calles después de las 7 de la noche.
Las áreas recreativas, las zonas publicas para la conexión WiFi y los parques públicos continuarán cerrados en estos momentos al publico.
En cuanto a los transportistas privados, incluidos los bicitaxistas, por el momento tampoco podrán ejercer su actividad. Asimismo, los ómnibus del transporte público y la transportación marítima de pasajeros entre los puertos de Nueva Gerona y Batabanó continuarán suspendidos.
En el caso de los viajes de avión, solo funcionarán para trasladar personas que no residan en la Isla de la Juventud y traer de vuelta a pineros que hayan quedado varados en otras provincia del país, todos los cuales a su llegada al territorio tendrán que permanecer 14 días en centros de aislamiento.
A pesar de dar el primer paso hacia la desescalada, las autoridades sanitarias han advertido que no descartan la posibilidad de que existan casos de personas con el COVID-19 que no hayan sido detectadas por ser asintomáticas. Por este motivo, e nasobuco seguirá siendo de obligatorio uso, así como el distanciamiento social en todas las áreas publicas.
Desde que empezó la pandemia en este territorio se han diagnosticado un total de 42 personas positivas, de los cuales una falleció.


