El Gobierno cubano reveló hoy que ya comienzan a preparar las regulaciones sanitarias necesarias para tratar el coronavirus como una «enfermedad endémica» en el país, pues permanecerá para prevén que permanezca entre la población de la Isla, como el sida, el dengue o la influenza común.
Así lo confirmó esta mañana el doctor Franciso Durán García, director nacional de Epidemiología del Ministerio de Salud Publica de Cuba, asegurando que las autoridades sanitarias están organizar una serie de medidas para tratar la COVID-19 como una endemia y no una pandemia, intentando lograr en un futuro cercano que pueda producirse nuevos brotes de propagación y muertes en la Isla.
«Se trabajará como hasta ahora, pero intentaremos que el numero de casos diagnosticados y confirmados sea el menor posible, y de producirse algún brote masivo que este no tenga trascendía hacia la gravedad o el fallecimiento de los pacientes», explicó el Dr. Durán.
Una enfermedad endémica es aquella que permanecen entre la población de manera continua y estabilizada, sin una cura que la erradique y sin la necesidad de que surjan brotes generalizados. Ejemplos de ellas son el sida, el dengue, la influenza, entre otras.
Aunque el Dr. Durán dijo que todavía no se podría pronosticar cuándo ocurriría ese momento en Cuba, adelantó que para ese hipotético escenario ya existen «un grupo de medidas de control sanitario internacionales y un reglamento para que la situación sea menos convulsa».
También volvió a referirse a la reapertura de vuelos internacional, reiterando que de momento no se abrirán, a pesar de las ventas de boletos que están realizando algunas aerolíneas, como American y Southwest.
«Cuando la enfermedad se haga endémica, Cuba podría hacer una apertura controlada y entre las medidas que se aplicarían van desde registrar a la persona que entra, tomar la temperatura corporal, hacer un chequeo médico, un seguimiento de su evolución en las primeras 72 horas y, ante cualquier síntoma, someterla a un aislamiento», explicó el Dr. Durán, revelando así por primera vez cuál sería el posible protocolo de actuación una vez que Cuba pase a lo que ya internacionalmente se conoce como «nueva normalidad».
“Tenemos la suerte de no tener fronteras terrestres, por lo que las entradas siempre son por vuelos o puertos”, dijo, y enfatizó en que con el cumplimiento de esas medidas se puede abrir el acceso a Cuba con el menor riesgo posible, “pero en su momento, y aún no se está en ese momento”.
