El Gobierno cubano advirtió hoy que a pesar de que en los últimos días han disminuido de forma considerable el numero de pacientes positivos al coronavirus en el país, a partir «del día 60» de la llegada de la pandemia a la Isla podría presentarse un «escenario desfavorable» para la evolución de la enfermedad y dispararse el numero de infectados.
Según explicó el doctor Franciso Durán García, director nacional de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública (MINSAP), los países que presentan una curva de evolución similar a la de Cuba, como Azerbaiyán, Irak y Bosnia Herzegovina, han tenido sobre esas fechas un rebote de infectados.
«Los modelos de pronósticos compilados por un grupo de reconocidos científicos y matemáticos cubanos de la Universidad de La Habana sobre la evolución de la enfermedad en la Isla esclarecen que pudiera presentarse un repunte en la curva de contagios a partir de ahora, si no se toman todas las medidas necesarias de higiene y distanciamiento social», precisó el especialista.
Durán García recalcó que se debe mantener el uso obligatorio del nasobuco, el lavado de las manos y asistir a los hospitales o consultorios ante cualquier síntoma o sospecha del del virus.
Las autoridades sanitarias cubanas anunciaron el pasado fin de semana que desde esta semana se comenzarían a realizar pruebas masivas en la población para detectar posibles casos de personas asintomáticas que fuesen portadoras de la enfermedad o que ya la hubiesen superado, gracias a los test TCR, los cuales permiten encontrar en el organismo los anticuerpos que genera el coronavirus en las personas infectadas.
Hasta la fecha se registran en el país mil 783 casos diagnosticados del nuevo coronavirus y se mantienen ingresados mil 553 pacientes, mientras se vigilan en la atención primaria de salud unas tres mil 900 personas. Pero, es quizás el dato más alentador, a pesar de las malas noticias, que mil 229 cubanos han evolucionado de manera favorable a la enfermedad y ya se encuentran en sus hogares, gracias en buena medida a la efectividad de los protocolos de tratamiento que siempre han pretendido evitar la gravedad de los infectados.
