La conocida Universidad de Ciencia Informáticas (UCI) en La Habana ha sido convertida en el hospital de campaña más grande Cuba para ingresar casos sospechosos y confirmados con coronavirus, tras verse desbordada la capacidad de ingreso de los centros hospitalarios en la capital de la Isla.
Según los reportes de la prensa estatal, el hospital lleva por nombre Ernesto Che Guevara, y allí se atenderán a pacientes sospechosos de alto riesgo que hayan sido diagnosticados positivos al COVID-19.
Este hospital de campaña contará con 170 camas para terapia intensiva y la infraestructura necesaria para la atención de este tipo de enfermos, afirmó el director provincial de Salud de La Habana, Carlos Alberto Martínez Blanco.
Además, la institución educativa, convertida en centro médico ante el aumento de casos sospechosos y positivos de coronavirus en la capital cubana, tiene capacidad para acoger a otros 500 pacientes de bajo riesgo en otros edificios aledaños, que hasta el momento eran utilizados como dormitorios por los estudiantes que allí cursan carreras.
Los sospechosos de bajo riesgo constituyen la mayoría de los que se ingresan actualmente en La Habana y a los cuales se les realiza al quinto día una prueba de PCR y si da negativa pueden regresar a sus casas
Sin embargo, ya las autoridades trabajan en ampliar estas capacidades y aseguran que a partir de la próxima semana tendrán lista las facilidades para ampliar el numero de camas hasta las 2000, donde podrán recibir los contactos de casos positivos, quienes deben permanecer en aislamiento por 14 días.
Estas capacidades extras serán ocupadas por las personas con síntomas respiratorios con menos de 50 años y sin comorbilidad, es decir, que no sean hipertensos, asmáticos o padezcan otras patologías.
De manera puntual se aclaró que los primeros pacientes serán sospechosos de bajo riesgo y en otro momento se incorporarán los positivos de bajo riesgo como los asintomáticos. A la par que las autoridades especificaron que varios cuartos poseen dos camas, pero se cumplen las normas para evitar el contagio como una distancia separadora de 1,5 metros.
Además, contará con motel que tiene capacidad para 250 personas y se ocupará durante la rotación médica pues el personal trabaja 12 horas y descansa la misma cifra; al concluir sus labores estarán 14 días en cuarentena antes de volver a sus hogares.
La UCI, una idea del fallecido Fidel Castro, parece ser la mejor opción en La Habana para atender a tal numero de pacientes dado que está completamente alejada de la ciudad (en la carretera a San Antonio de los Baños, Km 2 1/2, municipio La Lisa) y ofrece un mejor aislamiento.
A decir del director provincial de Salud, la ubicación de la instalación facilita la interacción con otras que se encuentran cercanas a ella como el hospital Frank País, para el eventual intercambio entre pacientes a partir de la necesidad que pueda existir en la atención a alguien que, por su condición, comporte algún riesgo y se precise sea atendido en una institución con mayores capacidades y posibilidades, sobre todo en los cuidados intensivos.
