El gobernante cubano Miguel Díaz-Canel aseguró que su Gobierno no está ocultando ni manipulando las cifras de los casos de coronavirus en el país y dice que están siendo «transparentes» con las estadísticas oficiales.
«Basta ya de estar creyendo en aquellos que constantemente están tratando de poner en duda la veracidad de lo que se está dando. Nosotros no estamos escondiendo ningún caso, aquí todos se han informado limpiamente, en el momento en que se han producido», enfatizó el mandatario durante la reunión que analiza a diario el avance de la pandemia por el país.
«Vamos a vacunarnos también contra la desinformación y la neurosis que pueden generar las falsas noticias que están circulando en las redes, en los avisos apocalípticos», agregó.
Ante las denuncias que en las ultimas semanas han aparecido en distintos medios de prensa y en las redes sociales sobre la falta de transparencia en las estadísticas oficiales que ofrece el Gobierno, Díaz-Canel defendió a las autoridades sanitarias en la Isla, asegurando que «están cumpliendo con su responsabilidad de ofrecer a través de esos medios toda la información disponible, con inmediatez, transparencia y sin alarmismo».
Aunque quizás sea cierto que el Gobierno no está escondiendo cifras, si los reportes oficiales están tardando en revelar la cantidad de casos confirmados por provincias. Esta misma semana, el martes, el Ministerio de Salud Pública de Cuba informó que en la provincia de Holguín habían solo 2 casos nuevos de contagiados. Sin embargo, la Dirección Provincial de Salud en esa provincia confirmó que la región acumulaba 19 enfermos por coronavirus.
Las palabras de Díaz-Canel sobre la transparencia en la información que publican llega en medio de una fuerte y amenazante campaña lanzada por las autoridades en la que advierten que podrían castigar con hasta 4 años de prisión a las personas que difundan noticias faltas o «predicciones maliciosas» sobre el coronavirus.
«Nuestro Código Penal establece sanción de uno a cuatro años de privación de libertad al que difunda noticias falsas o predicciones maliciosas tendentes a causar alarma o descontento en la población, o desorden público», recogió una publicación del diario Granma, órgano oficial del Partido Comunista de la Isla


