La prensa estatal en Cuba sigue promoviendo de forma arriesgada y con poco basamento científico el uso de fármacos de origen natural y la medicina homeopática como una apuesta efectiva para combatir el coronavirus.
Un nuevo reporte publicado hoy por el diario Sierra Maestra da cuenta sobre las tabletas de Anamú, un medicamento de origen natural que se produce en los Laboratorios Farmacéuticos de Oriente, en la provincia de Santiago de Cuba, y que se encuentra bajo la dirección de la empresa BioCubaFarma. Este, según el artículo, se trata de un fármaco que «estimula la producción del Interferón en el organismo», lo que lo hace «efectivo» para ayudar a combatir la presencia diversos patógenos y virus como el COVID-19.
El sitio web de los laboratorios donde se producen estas tabletas asegura que las tabletas de Anamú son «efectivas para el tratamiento de la inmunodeficiencia celular en los adultos».
«Estudios realizados han demostrado que estas aumentan la actividad de los linfocitos NK en un 100%, estimula la producción de Interferón, Interleukina 2 e Interleukina 4, y ocasiona un aumento significativo del índice fagocítico de los granulocitos humanos», indica el citado estudio, encabezado por la científica cubana Zoe Lemus.
Las tabletas de Anamú son un comprimido creado a partir del polvo de las hojas y tallos jóvenes de la planta medicinal Anamú, los cuales se expenden en dosis de 400 mg.
Según publicación científica se encuentran presente en esta planta oligoelementos tales como Selenio, Zinc, Cobre, Hierro y Magnesio, los cuales poseen efectos beneficiosos sobre el sistema inmunológico.
El texto advierte que este fármaco no debe administrársele a los niños, diabéticos y embarazadas.
Incluso, el citado medio asegura que en las ultimas semanas, tras la llegada del coronavirus a la Isla, la población de Santiago de Cuba ha comenzado a comprar con mayor frecuencia las tabletas de Anamú, como relacionando de alguna forma su consumo como un tratamiento efectivo para hacerle frente.
No es primera vez que se oye hablar de este fármaco natural, pues ya la prensa cubana lo ha promovido como un inmunoestimulante que favorece a pacientes con cáncer y Sida, que ha llegado a ser suministrado a pacientes en las consultas de oncologia e infectados del virus del Sida en el oriente de Cuba.




