La niña cubana Ashlin Naara, quien viajó a Miami desde La Habana gracias a una visa humanitaria para ser tratada de la rara enfermedad que la aqueja, ya se ha sometido a los primeros exámenes médicos que le permitan obtener un tratamiento para el mal que la aqueja.
Los doctores en Cuba le dijeron a la familia que no poseían las condiciones para realizarle las pruebas necesarias, pues la tecnología es inexistente en el país. La pequeña Ashlin debía someterse una prueba molecular que en la isla es imposible realizar.
Desde el pasado lunes, Ashlin está siendo tratada por un grupo de especialistas gracias a una campaña de recaudación de fondos lanzada por sus familiares en la plataforma GoFundMe.
Yeni Núñez Jérez, madre de la pequeña Ashlin, publicó ayer en las redes sociales un emotivo texto en el que quiso agradecer a todos «las numerosas estrellas» que han tenido algún gesto de ayuda con su hija y la familia.
«Para todos ellos te pido PADRE SANTO, lluvia d bendiciones. Desde lo más profundo de nuestros corazones le agradecemos a todas las personas que han dispuesto un granito de arena para nuestra causa, para nosotros significan los ángeles que DIOS dispuso para pelear está batalla», escribió.
«Ya ganamos un combate, mañana empieza otra, por eso les pido que redoblen por favor sus oraciones, para que se habrán las puertas y se ensanche el entendimiento y sabiduría d los doctores», concluye el texto posteado por Núñez.
La niña y su madre llegaron a Miami el pasado jueves 30 de enero tras recibir una visa humanitaria. Yeni Núñez no pudo viajar con su otra hija más pequeña, quien se quedó Cuba ya que no le dieron visa.
La enfermedad que sufre Ashlin le ha provocado la pérdida de la visión, el habla y le impide caminar.


