Familiares de las tres niñas fallecidas en el derrumbe en el Barrio Jesús María en La Habana Vieja siguen sumidos en la tristeza y el dolor por la irreparable pérdida. Modesto Valdés, padre de Lysnavy Valdés, una de las víctimas, conversó con el presentador cubano Alexander Otaola y no tuvo reparos en manifestar sus más sinceros sentimientos sobre la tragedia.
El cubano confesó que recuerda a su hija como una niña querida por todo el barrio y que mantiene en su memoria el recuerdo del pasado 31 de diciembre, cuando juntos recibieron el año nuevo.
Padre de una de las niñas fallecidas en el derrumbe de La Habana Vieja arremete contra el gobierno
Durante la conversación con Otaola, Modesto no dudó ni un segundo en señalar al gobierno cubano como culpable por la muerte de su hija. Acusó a Díaz-Canel y a todo el “gobierno mentiroso” de la muerte de su hija.
“Sus hijos no caminan por debajo de balcones en mal estado. Ellos viven en barrios residenciales donde las casas en muy buenas condiciones, andan en carro y no tienen ese peligro”, expresó Modesto al dirigirse directamente a Díaz-Canel.
“El asesino de Díaz-Canel es el culpable”, agregó.
Del mismo modo, aseguró que la situación actual de las viviendas en Cuba es un reflejo de las malas políticas aplicadas durante los 60 años de la “Revolución”.
“Si en este país las cosas se hicieran como se deben de hacer, esas tres niñas hoy no estuvieran muertas”, expresó.
“Después de enterrar a mi niña pasé por el lugar del derrumbe y vi como lo estaban demoliendo para que no ocurriese otro accidente. Lamentablemente ya nada tiene remedio”, añadió.
Valdés afirmó que nadie del régimen los ha ayudado. Indicó que lo único que hicieron fue llevarles la ropa con la que murió su hija, la cual él se negó a recibir.
De igual manera, reveló que durante el velorio se le acercaron unas personas cercanas al régimen para ofrecerle dinero a modo de indemnización por la tragedia.
“La vida de mi hija no vale los 350 pesos que intentaron que yo aceptara. Eso es una falta de respecto. Eso no es protección. No me tomé ni el trabajo de mirarles a la cara porque no me interesa saber quiénes son”, expresó.
